Posición: Alero

Altura: 2,03 metros

Nacionalidad: Español

Edad: 22 años

Temporadas en Movistar Estudiantes: cinco (dos cedido en Huesca)

Dorsal: 9

Este año sí. Edgar Vicedo vuelve al Movistar Estudiantes para quedarse. Estar y ser importante dentro de la plantilla. Su renovación veraniega por dos temporadas más lo deja claro.

A pesar de ser el canterano con menos experiencia (Jaime Fernández y Darío Brizuela-importante al inicio de la pasada temporada) Vicedo es la gran esperanza de la escuela del Magariños. El 'Estu' ha optado por fichar jugadores expertos y conocidos, y apostar por la continuidad de casi todos sus canteranos. Vicedo representate este último grupo.

El alero, tras jugar dos años cedido en el Huesca (LEB Oro), volvió a su club en abril de 2015. Esa campaña disputó los últimos partidos, prácticamente sin relevancia. En la siguiente temporada, su suerte no mejoró, y el jugador madrileño apenas contó para Diego Ocampo y Sergio Valdeolmillos, disputando solo 10 minutos de media por partido. Formaba parte de la rotación, sí, pero de la del fondo de armario.

Circunstancia que ha cambiado en pretemporada. Vicedo ha promediado 8,2 puntos por partido, con topes de 15 ante CAI Zaragoza en el primer partido de preparación y BC Khimki en la presentanción en Magariños. Ambos partidos, por cierto, resueltos con victorias. Feliz augurio.

Confianza total del club: Vicedo renovó por dos temporadas este verano

La polivalencia exterior de Vicedo-es un '3' pero con buen rango de tiro-juega a favor para Maldonado. La confianza depósitada en él, también, algo indispensable para el crecimiento de cualquier jugador, y con más ente para un canterano. Además, en la plantilla estudiantil solo aparece un alero más, Grimau, por lo que el aumento de minutos de Vicedo es seguro y está justificado. Titular o no, puede variar dependiendo del rival. Así, al menos, se ha reflejado en pretemporada.

Otro punto a favor es su genial conexión con Brizuela, con el que coincidió también en Huesca. Su química en pista puede dar grandes minutos ante la parroquía colegial. Rápido, enérgico y luchador, Vicedo es, especialmente, un jugador defensivo. De esos que no aparecen en las estadísticas, encargados de anular a la estrella rival, que encantan al entrenador y se llevan los aplausos más constantes del respetable. 

Vicedo cumple ese papel, y además es de la casa. Ojo que puede ser su año, ese para darse a conocer al gran público y asentarse de manera definitiva en la máxima categoría.