Los años pasan volando, y si no que se lo digan a Dwyane Wade y a sus trece años, 1.066 partidos y 51.168 minutos en Miami Heat, defendiendo esa franquicia, esa camiseta, con alegrías y penas, victorias y derrotas, jugadas de ensueño y triples imposibles. Simplemente un pequeño resumen de los trece años de Wade en Miami son las veces que se echó el equipo a la espalda y el Big-Three que, Pat Rilley ha dejado desvanecer de la franquicia de Florida.
En la temporada de 2003-04 la vida iba a cambiar para un chico de 1,93 que con 21 años iba a debutar en la mejor liga del mundo del baloncesto, la NBA. Al sonido de “En la quinta posición del draft de 2003, de la universidad de Marquetee en Milwaukee, Dwyane Wade para Miami Heat” Esas palabras iban a cambiar la vida al joven de Chicago. Con tres playoffs a sus espaldas y habiendo jugando con leyendas como Shaquille O´Neal, Ray Allen o estrellas actuales con pasos agigantados a leyendas cómo Lebron James, Chris Bosh. Habiendo vivido la época dorada con Heat y ahora jugando en el equipo de su ciudad natal, Wade ha sabido manejar a la NBA y culpa de su marcha la puede tener Pat Rilley, el que en el acto que le realizó Miami declaró arrepentido "Si lo pudiera volver a hacer, en el verano de 2014, después de la salida de LeBron, le tendríamos que haber dado el máximo a Wade igual que a Chris Bosh. Aquello estuvo mal. Fue un error grave y fue culpa mía"
En el partido que enfrentó a Chicago y a Miami en el American Airlanes Arena, dónde colgaron la camiseta de Wade, la emoción del escolta y gratitud hacia la afición se notaba a plena vista. 13 años dan para mucho, y tanto para Wade cómo para la afición y la franquicia fueron inolvidables y siempre estarán presentes.