Por segunda vez en su carrera LeBron James ha sido nombrado deportista del año por Sports Illustrated, que le ha otorgado el galardón por sus esfuerzos dentro y fuera de las pistas. 2016 ha sido un año de hazañas deportivas sin parangón, lo cual hace aún más importante este premio ganado por LeBron James. Desde que la revista empezó a otorgar este premio, solo dos personas lo han ganado en dos ocasiones: LeBron James en 2016 y 2012, y Tiger Woods en 1996 y 2000. La estrella de los Cleveland Cavaliers recibirá el premio en la gala de Sports Illustrated el próximo 12 de diciembre en el Barclays Center de Brooklyn, Nueva York.
Poco puede decirse que no se haya dicho ya sobre el año deportivo de LeBron James. Deportivamente, la temporada pasada está marcada por uno de los hitos deportivos más importantes de la historia. Encontrándose en las finales con un resultado más que desfavorable de 3-1 frente a los Warriors, el equipo con una mejor temporada regular de la historia, los Cavs debían ganar los tres partidos restantes para llevarse el título. La hazaña parecía más que improbable tanto por la imposibilidad de cometer ningún fallo como por el rival que tenían en frente los Cleveland Cavaliers. Tras la suspensión de Draymond Green en el quinto partido, LeBron James y Kyrie Irving anotaron 41 puntos cada uno en su visita al Oracle Arena para ganar el partido, alargar la serie y que la misma volviese a Cleveland. En el sexto partido, LeBron volvió a a echarse el equipo a la espalda, anotando otros 41 puntos para forzar el séptimo y definitivo partido.
Llegó el último partido. Los nervios estaban a flor de piel en la bahía, ya que los Warriors estaban a punto de tirar por tierra una ventaja de 3-1 a su favor en la final, algo que no había sucedido en toda la historia de la liga, y los Cavs estaban más cerca que nunca de ganar su primer campeonato, así como de ganar el primer título para Cleveland en 52 años de sequía deportiva en la ciudad. Tal y como había hecho durante toda la serie, LeBron dominó todos y cada uno de los aspectos del juego, acabando el partido con un triple doble (27 puntos, 11 rebotes y 11 asistencias) y logró lo imposible. Sonaba la bocina en el Oracle y los Cavs eran, por fin, campeones de la NBA. Una vez finiquitada la final, no quedaba nada más que rendirse a la actuación de LeBron que, con promedos de 29.7 puntos, 11.3 rebotes, 8.9 asistencias, 2.6 robos y 2.3 tapones por partido, había liderado todas y cada una de las estadísticas entre los jugadores de ambos equipos, algo nunca visto. Nadie había hecho más que él ni mejor, lo cual le valió para ganar el premio al MVP de las Finales de manera unánime.
Pero LeBron es y significa mucho más para el mundo que sus hazañas deportivas. Es su labor y trabajo fuera de las canchas lo que le ha hecho el ganador de este premio, imponiéndose a los Chicago Cubs, otro de los grandes favoritos para llevarse el galardón. El equipo de béisbol de Chicago realizó también una increíble campaña que acabó con el título de las World Series, el cual habían conseguido por última vez 107 años atrás, y lo consiguieron, irónicamente, remontándole un 3-1 a los Cleveland Indians. Como la propia revista anuncia “Él no ha sido el único jugador en acabar con una sequía de títulos. Ni siquiera ha sido el único deportista capaz de remontar un 3-1 en contra para acabar con tal sequía. Pero sí ha sido el único que ha hecho todo eso para ganar algo más que un anillo. Al ponerse a los Cavaliers a la espalda en las Finales de la NBA, cumplió una promesa que le hizo a su ciudad y a toda su región.”
No es que LeBron haya salvado Ohio, pero ha ayudado a la región de maneras inimaginables. James representa el impacto que un deportista puede tener más allá de los anillos y las medallas. Está dispuesto a hablar de cualquier tema y de todas las situaciones peliagudas que afectan al mundo día tras día. LeBron ha tomado la palabra para hablar de la violencia racial y de la brutalidad policial, se ha puesto de lado de Hillary Clinton, ayuda a miles de niños ayudándoles a estudiar y otorgándoles becas universitarias con aproximadamente 4 millones de dólares de su propio bolsillo. James se encarga de recordar que el deporte puede ser mucho más que solo deporte y eso es lo que le ha hecho ganar el galardón al deportista del año de Sports Illustrated. Y es que LeBron es el mejor deportista del año porque es más que un deportista.