Probablemente no haya nadie en la NBA que sepa tan bien lo que significa enfrentarse a los Spurs como LeBron James. Y es que mañana sábado 21 de enero, James se enfrentará a los de Popovich por 24ª ocasión en liga regular. Eso, sumado a los 16 encuentros que ha disputado contra ellos en las Finales y las horas que ha pasado estudiándolos, no deja duda sobre el conocimiento de LeBron sobre los texanos.

Tras la victoria conseguida por los Cavaliers en Phoenix por 118 a 103, a la que LeBron aportó 21 puntos y 15 asistencias, los periodistas no tardaron en preguntarle sobre sus próximos rivales. James, por su parte, no titubeaba a la hora de analizar la calidad de los mismos. "Creo que [Popovich] es el mejor entrenador de la historia," declaraba James sin dudarlo ni un solo segundo. "Tienes que ser duro mental y físicamente cuando te enfrentas a uno de sus equipos. Cualquier cosa que quieran hacer, la harán. Y eres tú quien debe intentar descifrar sus intenciones."

El respeto y admiración entre jugador y entrenador va en ambas direcciones y el líder de los Spurs tampoco ha dudado nunca a la hora de alabar a James. Popovich ha pasado horas y horas pensando en la manera de frenar a LeBron a lo largo de su carrera e incluso ha llegado a trabajar con él. Se conocieron por primera vez en el verano de 2004, cuando ambos compartieron el vestuario del combinado nacional americano en los Juegos Olímpicos de Atenas. Popovich era entonces uno de los asistentes de la selección, mientras LeBron iba a disputar sus primeros minutos con la misma, tras llevar solamente un año en la liga.

LeBron James (9) y Gregg Popovich en Atenas, 2004. | Fotografía: Reuters
LeBron James (9) y Gregg Popovich en Atenas, 2004. | Fotografía: Reuters

En 2007, LeBron llevó a unos Cavaliers en los que nadie confiaba hasta la final de la NBA, donde se toparía por primera vez con Popovich y los suyos. El resultado de 4-0 a favor de los Spurs y, sobre todo, la defensa que diseñó Coach Pop han sido claves en la carrera de James. El alero quedó anulado en esas Finales y vio la necesidad de convertirse en un mejor tirador y un jugador más completo. Se volvieron a ver las caras en 2013, cuando LeBron, entonces las filas de Miami Heat, realizó unas magníficas actuaciones para derrotar a los Spurs en siete encuentros y propinarle a Popovich su única derrota en las seis Finales que ha disputado. En 2014 hubo revancha y el cuento no pudo tener un final más diferente. Popovich anuló tácticamente a los Heat y les derrotó en cinco partidos, consiguiendo 14 puntos por partido más que sus rivales, el mayor margen en la historia de las Finales.

Más allá de los bien que juegan los Spurs bajo el mando de Popovich, el increíble balance de 1122 victorias y 494 derrotas o sus tres premios al entrenador del año, lo más increíble es su constancia. "Ser capaz de conseguir lo que ha conseguido, con lo que ha cambiado el baloncesto, y haber podido crecer aún más y adaptarse al juego, es impresionante," comentaba LeBron. "Hemos pasado de una liga en la que se jugaba hacia dentro, donde había que alimentar a los pívots, a una liga basada en el pick-and-roll y ahora en los triples. Pop ha sido capaz de adaptarse en todas las ocasiones y seguir liderando a esos jugadores. No lo entiendo."

Si alguien sabe lo que es sufrir en sus carnes a Gregg Popovich, ese es LeBron James y si alguien está capacitado para hablar de su valía como técnico, también es él. La grandeza respeta a la grandeza y cada vez que se enfrentan James y Popovich es una ocasión perfecta para apreciar lo que ambos han hecho por el baloncesto.