Llegó a Ohio para suplir la baja importante de J.R. Smith, para ayudar en todo lo posible a los Cleveland Cavaliers. Kyle Korver llegó procedente de los Atlanta Hawks para asumir un rol al que en Atlanta ya estaba acostumbrado, es decir, ser un tirador.
A pesar de sus ya 35 años, Korver sigue teniendo pólvora en sus manos para anotar de tres puntos, una de las facetas que LeBron James y los Cavs buscaban para su plantilla. LeBron quería de él que, nada más recibir el balón, tirase, y es algo que está cumpliendo a la perfección.
Mismamente, en el partido que afrontaban los Cleveland Cavaliers frente a los Indiana Pacers el pasado miércoles, el mejor Kyle Korver apareció. Hasta ese mismo momento, el veterano jugador no había dejado tantos destellos de calidad, pero si anotaba algún punto para ayudar al equipo.
En el partido frente a los Pacers, Kyle Korver consiguió anotar, nada más y nada menos, que ocho triples de nueve intentos, con un increíble 88% de acierto desde la línea de tres puntos. A estos triples se le sumaron numerosas canastas de dos puntos que establecían un total de 29 puntos en el casillero de Korver, a lo que complementó cinco rebotes. La gran aportación del jugador ayudó a dar una victoria muy importante a los Cavaliers por un resultado final de 132-117. Además, la victoria afianzó el liderazgo de los hombres de Tyronn Lue en la Conferencia Este.
Después de la gran exhibición de triples de Korver, el propio jugador ha conseguido superar a Jason Kidd en la tabla de máximos anotadores históricos desde la línea de tres, situándose en el séptimo lugar, con 1992 triples. El siguiente objetivo para Korver es Jamal Crawford, con un total de 2004 y ascendiendo, debido a que el jugador sigue en activo. Parece que el jugador ya se ha adaptado al juego de los Cavs, del cual sale muy beneficiado por la gran cantidad de triples que lanzan los de Ohio. Quién sabe si podrá alcanzar al trono del máximo triplista de la historia, el cual se encuentra ocupado por Ray Allen.