Si tenemos en cuenta todos los records que se batieron, y desde una perspectiva que mira por el espectáculo, podemos estar hablando de un All Star histórico, sin precedentes. Más de 100 asistencias y rebotes, 372 puntos combinados para hacer el partido con más anotación de la historia, una infinidad de mates...Pero haciendo un análisis más serio, y viendo la pobre imagen ofrecida en el aspecto defensivo de casi todos los jugadores, parece que todos estos records pierden su valor.
El Oeste consigue llevarse un partido de highlights gracias a la competición entre Russell Westbrook y el ídolo local, Anthony Davis, por ver quién lograba superar al mítico Wilt Chamberlain y proclamarse el jugador con más puntos anotados en un partido de All Star.
El partido comenzó con bastante igualdad, Anthony Davis dejó claras sus intenciones desde el primer momento, y durante todo el partido se le vió muy activo e implicado con el All Star de su casa. La nota positiva del encuentro fue la intensidad que intentó meter el griego Antetokounmpo. Llegó hasta los 10 puntos en el primer cuarto y dejó acciones defensivas demostrando que si se quiere, se puede jugar serio y dar espectáculo.
El primer cuarto acabó con un pique deportivo entre Isaiah Thomas y Russell Westbrook para poner el 53-48 a favor de la Conferencia Este.
El segundo periodo sirvió para ver en acción a DeAndre Jordan y Carmelo Anthony, que hasta entonces no habian disputado ningún minuto. El festival de mates y triples continuaba sin cesar ante un marcador que se disparaba y hacía soñar con los 400 puntos combinados al final del partido. Ante el arreón de Westbrook, que aprovechó el segundo cuarto para discutir el MVP a Davis con una serie de jugadas marca de la casa, Antetokounmpo y LeBron se pusieron manos a la obra para evitar que el partido se rompiera tan pronto.
Al descanso nos fuimos con 92-97 para el Oeste y con la sensación de que el record de Chamberlain iba a ser pulverizado.
Tras el parón en el descanso, y después del concierto express de John Legend, Curry se unió a la fiesta del All Star y animó un poco el encuentro. Anthony Davis seguía machacando el aro como una bestia. Poco a poco el partido se fue transformando: El Oeste cada vez se alejaba más en el marcador como consecuencia de la carrera por llegar antes a los 42 puntos de nuestros dos protagonistas. Russell Westbrook, con una serie de 4/5 en triples tomaba ventaja y se iba al último cuarto con la esperanza de llegar antes que "La Ceja".
Pero el último cuarto decantó la balanza en favor de Davis. Sus compañeros empezaron a jugar para el: Harden y Curry surtían de balones al pívot que no paraba de convertir alley-oops. En el Este no parecían muy preocupados con esta situación y siguieron con una pasividad defensiva escandalosa. Ni Irving, ni LeBron, ni Antetokounmpo jugaron muchos minutos en el último cuarto, hecho que demuestra la falta de interés por parte de la conferencia Este de luchar el partido.
Finalmente, el MVP se queda en la ciudad de Nueva Orleans: Anthony Davis supera la marca de los 42 puntos y eleva ese registro hasta los 52. 10 rebotes completan el Doble-Doble del gigantón nacido en Chicago. Westbrook se quedó a las puertas del record, igualando su mejor marca personal con 41 puntos y siete asistencias. Destacar los minutos en la segunda parte de Marc Gasol, que fue de menos a más en el partido. Kerr confió en el pívot español y este se lo agradeció tomandoselo enserio. 10 puntos, 10 rebotes y 8 asistencias para rozar el Triple-Doble.
Por el bando perdedor, el mejor jugador fue el griego Antetokounmpo. Su intensidad y ganas le bastaron para llegar hasta los 30 puntos. Kyrie Irving estableció su record personal de asistencias (14) y LeBron sigue agrandando su leyenda y ya es el jugador con más puntos en la historia de los All Star (291).
