Steve Kerr, técnico de los Golden State Warriors, no estuvo presente anoche en el último partido de la serie contra Portland Trail Blazers por problemas de salud, más concretamente los problemas de salud del entrenador provienen de una operación de espalda a la que se sometió tras ganar el anillo en el año 2015. Estos problemas están relacionados con el líquido espinal, lo que ha generado en Kerr migrañas y nauseas, aparte de insoportables dolores en las bolsas oculares.
El entrenador de los Warriors compadeció antes del cuarto partido de la serie que enfrentaba a Golden State Warriors y Portland Trail Blazers para confirmar su baja, definiendo que esta no será exclusivamente para un partido, y que incluso cabe la posibilidad de que no vuelva a entrenar hasta que termine la temporada.
“No se va dar el caso en el que entrene una noche y no lo haga en la siguiente. No voy a hacer eso a nuestro equipo ni a nuestro staff. Esperamos que la semana que viene o dentro de dos pueda darme cuenta, deduzca o sienta que puedo hacer esto o no”. Aporta el entrenador Kerr.
No es la primera ocasión en la que Steve Kerr se ve obligado a mantenerse apartado de la disciplina de Golden State Warriors por problemas de salud. En la temporada regular 2015-2016 se vio obligado a delegar los mandos del conjunto de la bahía a su ayudante por aquel entonces, Luke Walton, por los dolores de espalda que sufría como secuela de la operación de espalda a la que se sometió unos meses antes.
La baja del entrenador, Steve Kerr, se suma a las numerosas bajas que sufren los Golden State Warriors, aunque de momento parecen seguir en su línea tras imponerse en la primera ronda de Playoffs a Portland Trail Blazers con un global de 4-0.