La selección francesa luchará por revalidar su cetro de campeón del mundo tras vencer al equipo esloveno en semifinales por una renta de 6 goles. Los hombres de Didier Dinart fueron superiores durante todo el encuentro en un AccorHotels Arena volcado con los suyos, lo que complicaba aún más las cosas para una Eslovenia que llegó al descanso por debajo en el marcador y que no pudo darle la vuelta al partido en la segunda mitad.
De esta forma los anfitriones, a los que parece no pesarles el cartel de favoritos, continúan con su pleno de victorias en los ocho partidos disputados hasta el momento y deberán esperar para conocer quién será su rival en la gran final, el cual saldrá del duelo entre Noruega y Croacia (viernes, 20:45).
A por la victoria desde el primer minuto
El equipo galo sabía que tenía que salir a ganar desde el principio si quería evitar complicaciones ante una Eslovenia siempre peligrosa y que a pesar de no poder contar con hombres tan importantes como Dean Bombac o Uros Zorman, llegaba a esta ronda de semifinales habiendo superado a los actuales subcampeones del mundo, Qatar, en el choque de cuartos.
Dicho y hecho, Ludovic Fábregas fue el encargado de abrir el marcador y desde entonces los franceses fueron los únicos que lograron ir por delante en el electrónico, aprovechando el inicio algo dubitativo de Eslovenia para colocar el 6-2 a los 10 minutos de encuentro.
Sin embargo los hombres de Veselin Vujović, que acaban de ver como una situación de doble superioridad se cerraba con un parcial de 2:0 favorable a Francia, no estaban dispuestos a poner las cosas fáciles, logrando reducir diferencias hasta el 6 a 5. Pero las intervenciones de un inspirado Vincent Gérard (elegido mejor jugador del partido gracias a su 41% de paradas) y las rápidas salidas al contraataque materializadas por Valentin Porte, hacían que el equipo anfitrión volviera a disponer de una renta de 3 goles a falta de 10 minutos para la conclusión del primer periodo.
Francia seguía haciendo daño a la contra, y una exclusión de Janc seguida de los tantos de Mahé y Narcisse a portería vacía hacía que la renta se fuera hasta los 5 de diferencia a falta de apenas dos minutos para llegar el descanso. Sin embargo dos goles rápidos de Eslovenia, cuando parecía que los galos se iban a marchar a vestuarios con una ventaja bastante importante, ponían el 15 a 12 con el que se llegó al intermedio.
Francia no se relaja
Tras el descanso se produjeron los minutos de mayor igualdad en todo el partido, con una selección eslovena que trataba de reducir diferencias, de la mano de un Marko Bezjak que comandaba el ataque de los suyos y de un Matevz Skok que se mostraba acertado bajo palos.
Pese a esto, los tantos de Nedim Remili y el alto nivel mostrado por Vincent Gérard durante todo el encuentro impedían a la selección balcánica acercarse en el luminoso, llegando a situar la renta en 5 goles cuando se acercaba el ecuador de la segunda parte, 23 a 18.
El tiempo corría en contra de Eslovenia, y un tiempo muerto solicitado por Veselin Vujović seguido de dos goles de Darko Cingesar hacía pensar que los eslovenos podían entrar de nuevo en el encuentro, pero no fue así.
El acierto anotador de Remili, que sumó sus 6 tantos en el segundo periodo, y la gran defensa mostrada por los galos durante todo el choque sirvió a estos para igualar la máxima renta, 6 goles, antes de que Gérard cerrara el choque con una nueva parada, 31-25.