Dos meses después de la final de la Copa Oro 2019, Estados Unidos una victoria en sus últimos cinco enfrentamientos con México (cuatro oficiales y un amistoso), como aquel auténtico partidazo del 11 de septiembre de 2018 cuando los estadounidenses salieron airosos por la mínima diferencia en Nashville. Ambos anhelaban deleitarnos con otro clásico espectacular en el Estadio MetLife, East Rutherford.
Mucha intensidad y nula contundencia
El partido inició intenso por parte de los Estados Unidos, Weston Mckennie generó una clarísima ocasión en el minuto 12, un minuto después, Sergiño Dest también remató. La selección de las barras y las estrellas no dio tregua.
México golpeó en el momento más inesperado, Javier Hernández abrió la cuenta para los dirigidos por Gerardo Martino en East Rutherford. Estados Unidos recibió un jarrón de agua fría. La actual subcampeona de la Copa Oro insistió por todos los medios equilibrar las acciones.
La selección mexicana temporalmente anhelaba su cuarta victoria de los últimos seis clásicos de la Concacaf. Jesús Corona por poco extiende la cuenta en el minuto 32, Gregg Berhalter se quedó pensativo puesto que no encontró la fórmula para contrarrestar a su acérrimo rival.
Jesús Corona también tuvo otra ocasión y tampoco pudo extender la ventaja. Alfredo Morales se animó y tampoco pudo sorprender a los mexicanos. Estados Unidos buscó por todos los medios y el balón no entró. Aaron Long fue amonestado, tras dos minutos de adición la tónica no cambió.
México continuaba como el verdugo y ratificaba su mejor momento en el presente año. Gerardo Martino necesitaba afianzar su plan de cara hacia la Clasificación para la Copa del Mundo Qatar 2022. La selección estadounidense tras su sorpresiva ausencia mundialista, en pleno proceso de renovación volvió a tropezar con fantasmas conocidos.
En deuda en los clásicos de la Concacaf
En el complemento, Estados Unidos volvió por la épica remontada, Héctor Herrera se perfiló y la acción quedó anulada por posición fuera de juego. México buscaba sentenciar el marcador en East Rutherford. Alfredo Morales y Jorge Sánchez fueron amonestados
Gerardo Martino hizo algunos cambios para darle mayor movilidad al equipo. Andrés Guardado por poco anota, Estados Unidos la pasó mal, Hirving Lozano también generó otra, la selección mexicana puso contra las cuerdas a su similar estadounidense.
Erick Gutiérrez anotó el segundo en el minuto 78, México jugó con la desesperación de la selección estadounidense. Christian Pulisic estuvo cerca de descontar dos minutos más tarde, Jordan Morris erró y Uriel Antuna no perdonó, clásico sentenciado, 3-0.
Estados Unidos erró un penalti, Joshua Sargent no pudo aprovechar el rebote y la selección de las barras y las estrellas tuvo una noche para el olvido, aunque mostró algunos pasajes interesantes durante el amistoso. Apenas ganó uno de los últimos seis clásicos, una racha de terror.
Gregg Berhalter en pleno proceso de transición de reconoció la superioridad del actual campeón de la Concacaf. Ambos volverán a jugar el miércoles 11 de septiembre, Estados Unidos se medirá con Uruguay en San Luis, Misuri. Mientras que México tendrá un escollo exigente como Argentina en San Antonio.
La Concacaf confirmó que la Liga de Naciones será el clasificatorio para la Copa Oro 2021, doce selecciones accederán a través de su desempeño en la fase de grupos. Mientras que las cuatro plazas restantes se definirán a doble partido en marzo y junio de 2020.
Estados Unidos llega con muchas dudas para su último ensayo de cara al choque ante Cuba, Uruguay sin Luis Suárez y Edinson Cavani, sufrió y ganó 2-1 a Costa Rica en San José. Los dirigidos por Óscar Tábarez afrontan la preparación final para la Clasificación Sudamericana 2022. La Celeste busca reinventarse después de quedar eliminada en los cuartos de final de la Copa América 2019.