Tres puntos de oro para los neoyorkinos con los que entra en la pelea por una plaza que se otorgará a los mejores terceros tras la fase de grupos. En la primera parte se vio un desarrollo muy diferenciado en el que los locales tuvieron las mejores ocasiones para adelantarse en el marcador mientras que los ‘citizens’ fueron los que propusieron el juego. La segunda parte fue cuando los neoyorkinos dieron un paso adelante y demostraron esa esencia que la pasada temporada los llevó a realizar un gran año. Juego combinativo, rapidez en las transiciones y sobre todo gol. Un gol que les dio la victoria y les abrió la esperanza.

Pólvora mojada para Inter Miami

Buen inicio de partido para Inter Miami CF que tuvo claro desde un primer momento que necesitaba de una victoria para tener opciones de clasificar como uno de los mejores terceros a la siguiente fase. Durante los primeros minutos se pudo ver una gran intensidad en el juego de los locales, con mucha presión sobre la salida de balón de su rival y tratando de aprovechar de los errores que ello pudiese generar. Este planteamiento hizo que en este período consiguiesen tener la ocasión más clara hasta el momento con un remate de cabeza por parte de Agudelo que obligó a Johnson a esforzarse para rechazar el disparo.

Tras esta ocasión, el control de la pelota cambió de sentido y fue desde ese momento New York City FC el que tomó el protagonismo y consiguiendo realizar su mejor juego, sacando el balón desde la defensa, fue sintiéndose más cómodo. En este tiempo llegó incluso a generar bastantes acercamientos sobre la meta defendida por Robles, pero no fue capaz de encontrar un último pase que generase una ocasión clara.

Ante este dominio neoyorkino obligó a Miami a tener que variar su modelo de juego y buscar en el contraataque la manera de volver a generar peligro sobre la portería neoyorkina. Pero no fue capaz de en este tiempo de demostrar lo ofrecido en los primeros minutos y en muchas ocasiones, los jugadores de ataque se encontraban muy solos al recibir el balón, impidiendo así generar nuevamente peligro.

Tras la pausa para la hidratación, Inter Miami volvió a ser el del inicio del encuentro, y en los primeros minutos volvió a tener una buena ocasión. Esta vez fue con una acción a balón parado en la que Figal se elevó en el punto de penal, pero su cabezazo fue repelido por el guardameta. Unos minutos después volvió a gozar de otra oportunidad a balón parado, pero en esta ocasión el remate no fue tan claro.

Hasta el descanso, los dos equipos no lograron encontrar con su mejor versión a causa de una consecución de faltas, con las que el desarrollo del partido se detuvo sin que ninguno de los equipos consiguiese anotar.

NYCFC se reencuentra

Con la vuelta en la segunda mitad, New York City FC se convirtió en el protagonista. Control de la pelota, mejores ocasiones y dominio total del balón que le llevó a tener a su rival encerrado en campo propio y asediándole con constantes llegadas a portería. Tuvieron que pasar varios minutos hasta que en una acción que cogió por sorpresa a la defensa de Miami, lograron adelantarse en el marcador.

Mitrita, que estuvo muy activo durante estos minutos de la reanudación, vio el desmarque de ruptura de Tajouri-Shradi al que habilitó con un gran desplazamiento el largo. El extremo realizó un exquisito control que le dejó solo ante el portero y no dudo para batirlo y conseguir colocar a su equipo por delante en el marcador.

Este gol dejó muy tocado a Inter Miami CF que durante los siguientes minutos se vio encerrado por su rival y recibiendo ocasiones a cada llegada. Fue solo la suerte en su favor lo que les permitió no recibir ningún gol en este tiempo, y eso que Tajouri-Shradi contó con un par de ocasiones más para haber puesto mayor ventaja en el marcador, pero tuvo el acierto que minutos atrás.

Con el paso de los minutos se pudo ver por fin una reacción en el conjunto local, teniendo una mayor incidencia con el balón y cobrando mayor protagonismo con la pelota. Trató de encontrar espacios que percutir en la defensa neoyorkina, pero no consiguió encontrarlos. Mucha de esta culpa fue del buen trabajo defensivo del equipo rival que con una presión intensa sobre todo en la zona de creación. La única manera en la que el equipo encontró la posibilidad de generar fue con acciones a balón parado, pero tuvieron la efectividad deseada.

New York City FC supo leer a la perfección el partido desde ese el instante en el que los rivales tomaron el mando de la pelota. Bien juntos en defensa y tratando de sorprender con veloces transiciones que tomasen desprevenida a la defensa rival. En este trabajo destacó James Sands que manejó le ritmo del partido y ayudó a que el resultado no se moviese.

Las noticias fueron peor aún para los locales ya que en los últimos minutos del partido y estando volcados en el ataque, vieron como Agudelo veía la segunda tarjeta amarilla, dejando así a su equipo con un jugador menos. Esta expulsión apenas tuvo incidencia y el partido terminó con la victoria de los neoyorkinos, dejándole opciones de pasar como mejor tercero.