Tras una temporada impecable hasta el momento, con cinco títulos en su haber de los cinco disputados, y ante la posibilidad de consagrarse con la conquista del Mundial de Clubes, lo que significaría redimir el sextete logrado por el FC Barcelona en 2009, los bávaros han acudido al mercado apresurados ante el cierre del mismo para finiquitar la plantilla. Marc Roca, Douglas Costa, Choupo-Moting y Bouna Sarr se han unido a la disciplina sobre la bocina.
Tras la salida de Thiago, Perisic, Coutinho y Odriozola, Hansi Flick mostró en rueda de prensa la necesidad de incorporar nuevas caras que paliaran la marcha de estos cuatro futbolistas. El profundo fondo de armario con el que contaba el técnico alemán la pasada temporada fue una de las claves para llegar a agosto con toda la plantilla enchufada. Tras la llegada de Leroy Sané por 50 millones de euros, se incorporó a coste cero a Nübel (24) del Schalke 04, y a Nianzou (18), joven central francomarfileño procedente del Paris Sain Germain. El zaguero terminó contrato con el equipo parisino y aterrizó en Baviera, movimiento que ha calcado Choupo-Moting este lunes. El camerunés de 31 años firma hasta 2021 con el campeón europeo tras finalizar su estancia en el subcampeón. El ex de Stoke y PSG vuelve a Alemania tras su paso por las filas de Hamburgo (2007-11), Núrenberg (2009-10), Mainz (2011-14) y Schalke (2014-17). El delantero llega para reforzar el puesto de '9', posición en la que el Bayern solo dispone de Robert Lewandowski y del joven Zirkzee.
Para el mediocampo, los germanos han apostado por Marc Roca (23), joven talento del Espanyol. El centrocampista firma hasta 2025 en una operación cuyo coste ha oscilado entre los 10 y los 15 millones de euros. A pesar de su juventud, aporta criterio con el balón, ofrece seguridad defensiva y domina un amplio espacio del terreno de juego gracias a su buen posicionamiento y aptitudes físicas. Su crecimiento no ha dejado de crecer en las últimas temporadas, y el Bayern, consciente de ello, ha apostado por él. Joshua Kimmich, Leon Goretzka, Corentin Tolisso y Javi Martínez serán los futbolistas contra los que tendrá que competir para hacerse con un puesto en el once. Un auténtico desafío para el español.
El siguiente futbolista en aterrizar en Múnich ha sido Douglas Costa, que vuelve a la disciplina tras su paso entre 2015 y 2018. Llegó a Baviera procedente del Shakhtar Donetsk, y luego partió rumbo a Turín por 40 kilos. Su estancia en la Juventus no ha sido la más exitosa. Lastrado por las lesiones, el brasileño ha jugado 103 partidos, donde ha marcado 10 tantos y ha repartido 21 pases de gol. El extremo regresa en calidad de cedido, en sustitución de Perisic para batirse con jugadores de la talla de Gnabry, Coman y Sané.
La última incorporación del Bayern ha sido la del lateral derecho Bouna Sarr (28). Firma hasta 2024 tras dejar el Olympique de Marsella, que ha recibido 10 millones de euros por el traspaso. El experimentado defensor galo recala en el Allianz Arena para paliar la marcha de Odriozola, y como firme rival de Pavard por un puesto en el carril derecho. La operación ha acarreado que Michael Cuisance tome el camino contrario con destino el Velodrome. El joven medio francés permanecerá cedido esta temporada en el Marsella.
Con tres refuerzos de una tacada el día del cierre de mercado, gracias a la enorme labor de su director deportivo Hasan Salihamidzic, el conjunto muniqués ha cerrado definitivamente su plantilla. El causante de todos estos movimientos, ha remarcado en las distintas presentaciones de los futbolistas la ilusión que inunda el club ante la nueva temporada. Además, ha destacado la línea marcada en los despachos del Allianz Arena para acometer incorporaciones: "Nuestra política de fichajes tiene dos pilares: adquirimos futbolistas contrastados como Sané y detectamos jóvenes talentos que rompen en el primer equipo como Alphonso Davies". La hoja de ruta adoptada se constata con la apuesta por promesas como Marc Roca, Nübel o Nianzou, y por figuras experimentadas como Bouna Sarr, Douglas Costa, Sané o Choupo-Moting.
El coste de los traspasos ha llegado hasta los 64 millones, que con los casi 30 kilos que dejó Thiago, equivalen a unos 35 millones de gasto final. Teniendo en cuenta el nivel que ya ostentaba el colectivo, sin duda estamos ante un Bayern aún más amenazante en su camino por revalidar el trono europeo.