OsasunaOsasuna VAVEL

Hijos del olvido (parte I): los borrones de Juanjo Lorenzo

En la última década, muchos son los jugadores que han pasado por Osasuna con más pena que gloria. Constantemente cuestionados o, directamente, inéditos, vagaron por Pamplona para acabar abandonando el club rojillo por la puerta de atrás. En esta primera edición, repasamos algunos de estos casos, concretamente los que corresponden a la época de Juanjo Lorenzo como directo deportivo del club navarro.

Hijos del olvido (parte I): los borrones de Juanjo Lorenzo
Montaje de Asier Ganuza [VAVEL.com]
asierganuza
Por Asier Ganuza

Hace poco más de un año, un histórico de Europa como el Olympiacos griego anunciaba la contratación de Juanjo Lorenzo como director deportivo. Previamente, el vallisoletano había trabajo para el club de su tierra, el Tenerife, Real Madrid y Osasuna. Su estancia en Pamplona, a donde llegó en 2003, coincidió con la época más brillante en la historia del club navarro, con una clasificación para la Champions League, una semifinal de UEFA y una final de copa, lo que no sería una simple casualidad. En su despacho se cerraron muchos de los fichajes que en la última década han llenado de alegría los corazones rojillos. Gente de la talla de Savo Milošević, Roberto Soldado, Jaroslav Plašil, Javad Nekounam o Ricardo López llegaron a la capital Navarra gracias a la gran labor que Lorenzo desempeñó durante siete temporadas en las oficinas de El Sadar.

Juanjo Lorenzo fue director deportivo de Osasuna entre 2003 y 2010, la edad dorada del club rojillo.

Hablamos, sin duda, de un galáctico de los despachos, pero que estuvo tremendamente limitado por las estrecheces económicas de Osasuna, lo que le impidieron cerrar contrataciones de alto nivel como, por ejemplo, la de Álvaro Negredo, que en su día tuvo pie y medio en Pamplona antes de recalar en las filas del Almería. Sin embargo, un presupuesto de los más bajos de Primera obliga muchas veces a jugártelo todo a una carta y casi a ciegas. Así, al igual que grandes jugadores, se han paseado por Tajonar en la última década un elenco de futbolistas que, por unos motivos o por otros, apenas han podido vestir la zamarra rojilla. Sujetos más habituales en la grada de El Sadar —o ni eso—, que en el césped; individuos que, por no aparecer, no aparecieron ni por rueda de prensa.

Este año, dos de los nuevos fichajes rojillos llevan camino de engrosar esta delicada lista —Joan Oriol y Ariel Núñez—, por lo que aprovechamos para repasar algunos de estos casos. Esta primera edición recopila las perlas del mercado que Juanjo Lorenzo, en su etapa como secretario técnico de Osasuna (2003-2010), trajo a Pamplona para completar la plantilla rojilla:

Parches poco precisos

El encargado de inaugurar esta lista, de dudoso privilegio, no es otro que Julio César Pinheiro. El centrocampista brasileño, de nacionalidad mexicana, llegó a Pamplona en verano de 2003 para cubrir la baja en banda izquierda de Christian Manfredini, pero se quedó muy lejos de las expectativas de directiva y cuerpo técnico. Pinheiro desembarcó en El Sadar procedente del Hellas Verona, de la Segunda División italiana. El equipo mastini se hizo con sus servicios tras una desbandada de jugadores en su anterior club, el Cruz Azul mexicano, en una clara apuesta de futuro, que cedieron en busca de minutos en el campeonato europeo. No obstante, la apuesta no salió demasiado bien. A pesar de la estrecha amistad que le unía con el técnico rojillo, su compatriota Javier Aguirre, solo pudo disputar seis partidos de la primera vuelta, lo que precipitó su salida del club en el mercado invernal. "No he podido estar a mi nivel y no me salió nada, pero estoy tranquilo, no pudo ser aquí y será en otro lado", aseguró esperanzado el futbolista en su despedida como jugador rojillo.

Nombre Edad Temporada Partidos jugados Goles
Pinheiro 27 2003/04 6 -

El siguiente "bluf" osasunista llegó en la temporada 2005/06. El Real Madrid se hizo, en una atípica operación, con el guerrillero rojillo Pablo García, cerebro, pulmón y corazón de los navarros durante las dos temporadas anteriores. En su lugar, aterrizó en Pamplona Marcelo "el Pato" Sosa. La idea de la directiva era simple y clara: continuidad. A priori, Sosa representaba los valores de "el canario": era uruguayo, rocoso, agresivo, con dotes de liderazgo y, teóricamente, no exento de calidad; es decir, el relevo natural de Pablo. Pero el Pato, que llegó cedido por el Atlético de Madrid en busca de los minutos que no le ofrecía Bianchi, demostró ser, simplemente, un mediocentro brusco, que repartía a diestro y siniestro y que hacía honor a su apodo. Con la aparición de Raúl García y el gran estado de forma de Patxi Puñal e Iñaki Muñoz, Sosa apenas disputó once partidos, dejando en Pamplona un débil recuerdo.

Nombre Edad Temporada Partidos jugados Goles
Marcelo Sosa 27 2005/06 11 -

Remodelación fallida (2007)

Ahora, nuevo salto en el tiempo, esta vez, hasta el verano de 2007, uno de los más frustrantes en cuanto a fichajes de los últimos años. Los principales pilares del equipo en la temporada anterior —Soldado, Milosevic, David López, Raúl García, Cuéllar— hicieron las maletas y la dirección de Juanjo Lorenzo se vio obligada a actuar con contundencia. Pandiani, Portillo, Dady y Nico Medina llegaron para ocupar la delantera rojilla. Los dos primeros, contrastados arietes de la Liga Española, el tercero, uno de los máximos goleadores de la Primera División portuguesa, y el último, una joven promesa chilena que llegaba tras destacar en el Mundial sub-20 con su selección. Pero la realidad fue que ninguno de ellos convenció lo más mínimo al Cuco Ziganda.

El "Rifle" acabó demostrando su olfato con Camacho y Portillo y Dady, aunque solo fuera por insistencia y por el escaso fondo de armario de Osasuna, acabaron jugando bastantes partidos —eso sí, con unas paupérrimas estadísticas goleadoras—, pero especialmente sangrante fue el caso de Nico Medina, que ni siquiera llegó a debutar con Osasuna. Eibar, Huesca y Castellón fueron sus destinos —a modo de préstamo— en sus tres primeros años de contrato, pero sus actuaciones en la División de Plata —45 partidos y solo 5 goles— no acabaron de convencer al staff técnico rojillo, que la temporada siguiente rescindió el año de contrato que le quedaba para dejarle marchar libre al Akademik de Sofia.

Pero los fichajes fallidos del verano de 2007 no se quedaron ahí. Había que sustituir a Raúl García y Osasuna no quería dejar nada a la improvisación. Dos fueron los jugadores que llegaron para tapar el hueco dejado por el zizurtarra: 1. Hugo Viana, cedido por el Valencia; 2. Xavier Margairaz, con tres años de contrato y procedente del FC Zürich. El luso llegó a Pamplona con la vitola de estrella. Sus irregulares temporadas a orillas del Turia no empañaban la magia que desplegó en el Newcastle inglés y que le convirtió en un mediocentro de primer nivel mundial. Sin embargo, su historia en Osasuna fue demasiado sencilla para la complejidad técnica de un jugador de sus características: a Ziganda no le cayó en gracia y apenas dispuso de minutos. Tan solo once veces pudo verse a Hugo Viana con la camiseta rojilla, eso sí, la mayoría en el tramo decisivo de la temporada —con algunas actuaciones de mérito—. Realmente, resultó muy extraña su estancia en Pamplona, pues su rendimiento fue bueno cuando estuvo sobre el terreno de juego. Esto le llevó a reventar en un medio de su país cuando terminó su cesión. "Conocí en Osasuna al peor entrenador, junto a la peor persona. Trataba a los jugadores suplentes con desprecio", llegó a decir Viana sobre el Cuco Ziganda.

Otro caso fue el de Margairaz. El suizo era todo modales y buenas intenciones a su llegada a Pamplona, pero su frialdad acabó por pasarle factura. Comenzó la temporada alternándose entre el once titular y el banquillo, pero su irregularidad acabó por desplazarle en las rotaciones. Por si fuera poco, una inoportuna y grave lesión —fractura del ligamento cruzado anterior— en febrero de 2008 durante un amistoso ante el Eibar le obligó a perderse el resto de la temporada y la Eurocopa de 2008, celebrada en su país. Cuando consiguió volver a los terrenos de juego, Xavi ya no tenía sitio en el equipo y en enero de 2009 regresaría a Zürich como cedido hasta final de campaña; aunque ya no volvería a Pamplona. En julio de ese mismo año se cerraría su traspaso definitivo al club suizo por 400.000 euros. Su balance final: 13 tristes partidos en curso y medio.

Nombre Edad Temporada Partidos jugados Goles
Nico Medina 20 2007-2011 - -
Hugo Viana 24 2007/08 9 1
Xavier Margairaz 23 2007-2009 13 -

Suspenso en la recuperación (2008)

El descalabro mercantil rojillo apunto estuvo de costar demasiado caro. Hubo que pelear hasta la última jornada frente al Racing en Santander para conseguir la permanencia en un partido en el que muchos aficionados osasunistas empezaron a hacerse a la idea de volver al infierno de Segunda tras el gol de Iván Bolado en el 84, pero, finalmente, la victoria del Mallorca ante el Zaragoza arrojó a los maños al precipicio en detrimento de los navarros. Se había sufrido demasiado y solo una carambola permitió la permanencia. Quedaban muchas asignaturas pendientes en cuanto a la confección del equipo de la temporada siguiente (2008/09), pero, nuevamente, la dirección deportiva no estuvo a la altura.

Un experimento parecido al del suizo Margairaz fue la contratación de húngaro Krisztián Vadócz, un chicarrón de 1'90 con buena presencia y salida de balón. Pintaba bien el magiar, que llegó procedente del NEC Nijmegen de la Eredivisie, club en el que había conseguido engatusar a aficionados y técnicos —"Con dolor en el corazón, hemos hecho esta transferencia", decía su club en el comunicado oficial—. Había muchas esperanzas puestas en él, como demuestra su contrato por tres temporadas —más una opcional— con una cláusula de 10 millones, pero su rendimiento no fue el esperado. Cierto es, no obstante, que su caso fue algo distinto al del resto de sus compañeros en esta lista.

Ningún suspenso, pero demasiados suficientes. Al mediocentro se le notaba novato, sin embargo, cuajó buenas actuaciones. Durante su primera temporada jugó un total de 20 partidos de liga, 12 de ellos como titular, y marcó dos goles. En su segunda, 2009-2010, disputó 20 encuentros, adornados con 4 dianas. En su último año, 31 intervenciones y 3 tantos más —alguno de muy bella factura—. Un total de 71 partidos y 9 goles, pero que no le sirvieron para hacerse un hueco en el equipo. A finales de agosto de 2011, cuando el mercado estaba a punto de cerrarse, rescindió el año de contrato que le quedaba al no entrar en los planes de Mendilibar, sobre todo con la vuelta de Raúl García al equipo.

Precisamente, el mismo día que Vadocz se presentó en Pamplona, llegó un nuevo inquilino de la nave rojilla. Fue casi por sorpresa. Apenas se había hablado de él y su contratación fue cuestión de muy pocas horas. Era Tiago Gomes, internacional portugués sub-21 que llegaba a Osasuna procedente del Benfica tras haber jugado su última temporada en el Zaglebie Lubin polaco. Firmó por una temporada, ampliable a tres si la dirección deportiva lo consideraba oportuno, algo que no ocurrió. El luso fue quizá el precursor y máximo exponente de la maldición en el lateral zurdo de El Sadar. De hecho, Tiago no debutó con la camiseta rojilla en partido oficial, solo jugó dos amistosos —ante el Toulouse y el Izarra, marcando un gol— e incluso se le propuso jugar en el Promesas la segunda mitad del curso. No aceptó y, entre eso y las lesiones, acabó abandonando Tajonar igual que llegó: sin que nadie se enterara.

Otro jugador que llegó para poblar la medular rojilla fue Stephen Sunday Obayan "Sunny". El centrocampista nigeriano con nacionalidad española apuntaba buenas maneras cuando, en 2007, fue uno de los jugadores claves de la selección sub-20 en el Mundial de esta categoría. Aquel campeonato le llevó directo al Valencia, que pagó 1'5 millones al Polideportivo Ejido por hacerse con sus servicios. Fue presentado junto con el ahora jugador del Chelsea Mata, como una esperanza de futuro para el conjunto ché, con un contrato por 6 temporadas. Pero la falta de minutos en su primera campaña le hicieron buscar una salida en forma de cesión. Sunny llegó a Pamplona, pero la superpoblación en el centro del campo rojillo le ponía las cosas muy difíciles. Nekounam, Puñal, el propio Vadocz y, en a partir del mercado invernal, Antonio Hidalgo, cerraron las puertas de El Sadar al joven africano, que volvió a Valencia para ser cedido una temporada tras otra.

El último chasco —y este con mayúsculas— de este año y de la época de Juanjo Lorenzo fue Santi Ezquerro. El riojano, formado en el club rojillo, tuvo una dilatada carrera profesional en las que paseo su moto por Atlético de Madrid, Mallorca, Athletic de Bilbao y Barcelona, dejando una grata sensación en todos ellos. Internacional con España, más de 50 goles en Primera División, procedente del FC Barcelona, formado en Tajonar, etc. Lo tenía todo. Volvía uno de los hijos pródigos de Osasuna. A nadie se le escapaba su edad (32 años) y que volvía a su casa para retirarse, pero su fichaje llenaba de ilusión a la afición. Pero pronto se vio que Ezquerro ya había aparcado su moto para siempre. Su mala actitud en los entrenamientos, sus problemas físicos y su bajo rendimiento hicieron que únicamente pudiera disputar 10 partidos, en los que anotó un solo gol (frente al Sporting de Gijón). Al término de la temporada, jugador y club llegan a un acuerdo para rescindir el contrato, del que le restaba aún un año. Más tarde se le relacionaría con Málaga, Celta de Vigo y Deportivo de la Coruña, pero Osasuna iba a ser su ultimo equipo como futbolista en activo.

Nombre Edad Temporada Partidos jugados Goles
Krisztián Vadócz 23 2008-2011 71 9
Tiago Gomes 22 2008/09 - -
Sunny 20 2008/09 4 -
Santi Ezquerro 32 2008/09 10 1

Se suele decir que hasta el mejor escribano echa un borrón. Juanjo Lorenzo fue y es, un gran escribano, pero no siempre se puede ganar en la ruleta de la suerte. Ni unos son tan malos, ni otros son tan buenos. Los futbolistas dependen de rachas, suerte y estado anímico casi tanto como de calidad y olfato goleador. No es raro ver como un jugador es capaz de pasar del ostracismo a acaparar portadas —caso de Pandiani—, por lo que no sería un milagro del fútbol que Joan Oriol o Ariel Núñez acabaran contentando a la parroquia rojilla. De ser así, seguro que Ángel Martín González, director técnico de Osasuna entre julio de 2010 y septiembre de 2013 —es decir, su padrino en esta historia—, brindará con patxaran para celebrar su éxito. Un Martín González que será el protagonista de la segunda parte de este reportaje.