Veintitrés puntos en veinticuatro partidos. Diecinueve goles a favor y treinta y siete en contra. Estas son los registros del San Fernando CD en los seis meses transcurridos de competición con prácticamente el mismo equipo que sorprendió a propios y extraños la temporada pasada quedándose a las puertas de la fase de ascenso a Segunda.
Pero el fútbol no tiene memoria y ahora los azulinos están en una situación más que delicada, ya que se sitúan en el puesto de promoción de descenso a un punto de la salvación y a dos del descenso directo. El lugar en la tabla no es tan malo si se tiene en cuenta las pésimas sensaciones que transmite la escuadra de Pepe Masegosa, que se recuperó de un pésimo arranque con Juanma Carrillo pero ahora vuelve a lo mismo con el preparador sevillano.
La goleada en Lucena en un partido en el que era vital al menos un empate ha desilusionado a una Marea Azulina que ahora busca responsables. En VAVEL intentaremos dar las posibles claves del mal momento de los cañaíllas.
1) Fragilidad defensiva
Siempre se ha dicho que un equipo se comienza a hacer desde atrás. Que si un conjunto está en zona baja de la tabla, lo primero que debe conseguir es solidez defensiva para perder el mínimo de puntos posibles. La pasada temporada, el San Fernando, en su mejor racha, llegó a ser el equipo menos goleado junto al Jaén gracias sobre todo a un gran David Valle.
Este curso, aunque el veterano portero catalán sigue defendiendo la meta azulina, la situación es bien distinta. Son ya treinta y siete goles en contra (a gol y medio por partido) y esto se debe a la pasividad con la que la retaguardia isleña afronta los partidos sobre todo fuera de casa. Los azulinos han encajado veintisiete tantos a domicilio (no es de extrañar, por tanto que el San Fernando lleve sin ganar diez meses fuera y esta temporada solo haya conseguido empatar en Cáceres, Arroyo y Algeciras) con goleadas en Lorca (4-0), Granada (3-0) o Lucena (4-0).
Foto: sanfernandocd.com
Pero, además de lo abultado de los resultados, destaca la facilidad con la que le marcan al conjunto de Pepe Masegosa. El encuentro en el Ciudad de Lucena demostró el agujero que tiene el equipo en los laterales (Éder y Juanje son la sombra de lo que se esperaba) y, en el eje de la zaga, la lesión de Germán y los problemas de Borrego, que no termina de recuperarse, están siendo un lastre importante para los de la Real Isla de León.
Sambruno poco a poco va bajando en su rendimiento rozando ya los treinta seis años y se vio literalmente superado en el último partido, donde para colmo fue expulsado. Así las cosas, Pelegrina es el único que está cumpliendo dentro de lo que cabe con su misión, pero no puede multiplicarse para detener el asedio al que someten al San Fernando cada vez que juega fuera.
2) Nulidad atacante
La actual situación de la línea más adelantada del conjunto de José Masegosa es la segunda causa del estado de la plantilla en el campeonato. Únicamente diecinueve tantos en veinticuatro encuentros han materializado los de La Real Isla de León, es decir, 0’79 goles por partido. Actuando en el Iberoamericano 2010 han marcado en un total de doce ocasiones, mientras que lejos de Bahía Sur el esférico entró en la portería rival siete veces en siete choques.
Pólvora mojada (19 goles a favor) y frágil defensa (37 en contra)
La contundente derrota del San Fernando en el Ciudad de Lucena fue el último capítulo, no solo de la pésima imagen ofrecida, si no de la forma mostrada por los atacantes. El equipo azulino no llega al marco contrario, a pesar de que Masegosa trabaja con los delanteros más atrasados de lo habitual para crear oportunidades. El sistema deja un vacío en el último hombre. Pedro Carrión es el único delantero azulino que ha marcado (4 goles) ya que Ernesto, que adelantó a los isleños en Cartagena a los veinte segundos, y contratado como ‘9’, ha sido utilizado en la mayoría de los choques como extremo izquierdo.
Adrián Gallardo, goleador destacado en la categoría de bronce y en Tercera División, vino con la promesa de marcar y salvar al equipo de su ciudad, pero en estos cinco partidos que ha disputado no ha logrado ver puerta aún. Entre el propio Gallardo, Carrión y Ñoño, que pidió la baja federativa para que su plaza la ocupara Abel Molinero, marcaron en la temporada 2011-2012 en 95 ocasiones, esta comunión no se ha producido en la presente campaña. Actualmente, el ‘pichichi’ azul y blanco es Antonio Ocaña, que cumplirá el próximo sábado el segundo de los tres encuentros de sanción impuestos por su agresión a Alexis, jugador del CD El Palo.
3) Actitud
La Marea Azulina está de uñas con su equipo. Y no ya por el puesto que ocupan en la tabla (de hecho la permanencia está a solo un punto) sino por la actitud que están mostrando los jugadores en los últimos partidos.
Y es que el San Fernando tuvo un pésimo arranque de temporada y muchos aficionados pensaban que la plantilla le estaba “haciendo la cama” al por entonces entrenador Juanma Carrillo (de hecho, el técnico isleño así lo declaró a un medio local) con derrotas abultadas en El Palo y Lorca tras haberse vaciado en la Copa hasta que lograron traer de vuelta a Masegosa. El cambio de técnico funcionó, y el San Fernando acabó el año sumando siete puntos de nueve posibles. Incluso plantó cara y mereció mayor premio en el Ramón de Carranza. Todos pensaban que jugando así y con los refuerzos invernales no habría problemas para mantener la categoría.
Sin embargo, el equipo no respondió ante el Algeciras salvando un empate sobre la hora y en Écija fue superado de principio a fin ante la incapacidad azulina de levantar un resultado adverso ante el colista. La semana pasada tampoco brilló a pesar de ganar a El Palo y el equipo fue abucheado al descanso por su falta de intensidad, mientras que el partido en Lucena fue la gota que colmó el vaso.
En San Fernando todavía se recuerda como, el curso pasado, el equipo era capaz de sobreponerse a cualquier tipo de adversidad completando épicas remontadas ante La Roda en el descuento o ante el Cacereño después de ir perdiendo 0-2 en el minuto setenta y ocho. Esta campaña sólo ha sido capaz de voltear el partido contra el Guadalajara en casa.
La afición, clara: “Se puede perder, pero siempre hay que dar la cara”
Han sido más las derrotas bochornosas en las que los de Masegosa reciben un gol y bajan los brazos quedando como un juguete roto en manos del rival que tampoco necesita mayor esfuerzo para doblegar a un equipo sin alma ni orgullo para tratar de buscar la igualada. La afición en Bahía Sur es unánime: “Se puede perder un partido por goleada, pero siempre dando la cara”.
4) Bajas
Desde la pasada temporada, cuando Masegosa cogió las riendas del San Fernando CD, las lesiones han pasado a un plano principal. La conocida lesión de Ñoño fue la gota que colmó el vaso en la entidad, que un mes anterior vio como Paco Borrego se retiraba del amistoso ante la Selección China de José Antonio Camacho en la semana previa al ‘Derbi de la Bahía’.
En cuanto al presente campeonato, hasta once futbolistas del plantel ‘cañaílla’ han permanecido en enfermería. Son los siguientes: Zamora, Eder, Borrego, Antonio Sambruno, Carlitos, Ocaña, Germán, Pedro Carrión, Sebas, Ñoño y David Hernández.
Por si fuera poco, aunque los lesionados han disminuido en las últimas semanas, el once que saca en liza el preparador isleño cada fin de semana sigue siendo un quebradero de cabeza, debido a las sanciones y a las expulsiones sufridas. En el apartado de las expulsiones, hasta nueve integrantes del San Fernando han tenido que abandonar el césped antes de la finalización del partido y ocho han sido sancionados por acumulación de amarillas.
Foto: deportedelaisla.com
5) Ansiedad
En defensa de los jugadores, es de recibo resaltar que cuando las cosas no salen y estás abajo en la clasificación todo se vuelve en tu contra. Esto genera una ansiedad tremenda por querer agradar a la afición, algo que a veces juega malas pasadas ya que se peca de individualista (Cristian Terán es el mejor ejemplo) y una pérdida de balón genera la bronca del público en los partidos en Bahía Sur y fuera de casa, los jugadores quizás se relajan al no ir tan presionados en busca de la victoria y dan por bueno un punto, con el peligro que eso conlleva.
En este aspecto, Masegosa ha señalado por activa y por pasiva que se necesita enlazar dos triunfos consecutivos para que las aguas bajen más tranquilas en la entidad isleña. Sin embargo, el “Tourmalet” que debe subir el equipo en febrero (La Hoya este sábado y Albacete el fin de semana que viene, además de una visita de un rival directo como el Arroyo) no hace más que preocupar a la sufrida afición cañaílla. Hay incluso quien achaca la mala situación, sobre todo a domicilio, a la superstición de la segunda equipación con la que, de momento, solo se ha sumado un punto. Sea cierto o no dicho mal fario, el San Fernando necesita imperiosamente variar el rumbo.
6) Mala planificación
En el aspecto de la planificación de la plantilla, hay que destacar que el paso en esta temporada de dos entrenadores por el banquillo del Iberoamericano 2010 ha trastocado los planes iniciales. La defensa era la posición mejor cubierta con ocho futbolistas, pero las actuales bajas de Germán, Paco Borrego, Sambruno y Pelegrina han mermado estos puestos. Además, los estados de forma de Eder y Juanje no invitan al optimismo, ya que en esta segunda vuelta un gran número de tantos en contra se materializaron a raíz de los fallos de los dos laterales.
¿Era necesario fichar a tres extremos?
El mercado de invierno se abrió y la esperanza inundó a los aficionados azulinos, viendo como la defensa y la delantera podría verse reforzada con jugadores de incuestionable calidad. Tras la presentación de Adrián Gallardo, recalaron los extremos Zafra, José Vega y Abel Molinero. Ante estos acontecimientos, un sector de la grada se formuló la siguiente pregunta: ¿Era necesaria la contratación de tres extremos cuando la defensa pedía a gritos un jugador más? ¿O un centrocampista? Existe ‘overbooking’ en los extremos. José Vega, Zafra, Ernesto, Abel Molinero y Cristian actúan en las bandas.
En el próximo encuentro frente a La Hoya Lorca, José Masegosa tendrá que recomponer el puzzle de la zaga, y lo normal es que atrase a Jorge Herrero de central y llamar a Valentín o Álex Escobar, que tiene ficha con el primer equipo a pesar de jugar con el filial.
La dirección técnica y deportiva está comenzando a ser cuestionada. Tanto José Vega como Abel Molinero, aunque sus trayectorias avalan sus cualidades, son futbolistas que no han dispuitado un solo encuentro desde la pasada campaña y la grada empieza a mostrar su descontento por la planificación en los mercados de fichajes