Casi tres años finalizados en el 30 de junio 2017. Difícil de explicar la trayectoria de Alessio Cerci en el Atlético de Madrid, mayormente calificada como el error de Diego Pablo Simeone junto a las decisiones del cuerpo técnico rojiblanco, algo que podría resumirse en un sólo dato: el jugador se marcha con tan sólo once partidos vistiendo la elástica rojiblanca, dos de ellos en la campaña 2016/17 ante el Guijuelo - en la vuelta cuando el Atlético tenía la eliminatoria cerrada- y el Osasuna en una campaña donde han destacado las lesiones abundantes de muchos colchoneros, a pesar de ello, el técnico argentino no ha contado con los servicios de un jugador que en todo momento pareció ajeno al conjunto.

Alessio firmó el 31 de agosto del pasado 2014 para tres temporadas con el Atlético de Madrid y el pasado viernes 30 de junio ambas partes se ponían de acuerdo para concluir la relación entre el Atlético y el transalpino, tras la rescisión del contrato el jugador es libre para elegir su futuro. Los rumores han rondado su destino más inmediato, con el interés de equipos como el Calcio, el Olympiakos, o Las Palmas, pero lo cierto es que no hay nada seguro  en cuanto al próximo paradero del jugador.

La verdad es que el jugador nunca estuvo a la altura de la categoría y el compromiso que se le exigía. Al italiano le quedaba un año de contrato después de ampliar por una campaña más cuando se marchó cedido al Milán, pero el jugador, que ya intentó salir en verano de la pasada campaña sin éxito e incluso en el mercado invernal cuando no lo logró, en gran medida por su lesión, no contaba en los planes de Simeone, así que finalmente, el desenlace ha sido el más conveniente para ambas partes del acuerdo.