Comienza un nuevo año, pero la ilusión en territorio pepinero permanece. La ambición y el deseo por lograr hazañas insólitas persisten. Con dos caminos de por medio, la Liga y la Copa del Rey, el Leganés comienza un duro trayecto cuya primera parada se encuentra en la competición copera.
El Villarreal visita Butarque con la intención de llevarse un resultado ventajoso a casa, pero no lo tendrá fácil. Delante tendrá a un equipo el cual no hace mucho le superó en Liga y demostró que no hay rival pequeño. Hace un mes de aquel partido. Los jugadores que vestían la elástica blanquiazul tiraron de garra y corazón para dar la vuelta al marcador.
La Copa como estimulante
El mes de diciembre no fue muy activo en cuanto a partidos se refiere. Tan sólo disputó tres partidos, en los que se repartió los puntos con una victoria, un empate y una derrota. Por lo tanto, tiempo para afrontar los próximos acontecimientos no ha escaseado. Garitano sostenía una gran labor nada sencilla. Dar con la tecla exacta tras la irregularidad que había mostrado el equipo a lo largo de los dos últimos meses del año era el objetivo del técnico durante la época navideña y en el día de mañana se pondrá a examen.
La importancia que otorga el Leganés a la Copa del Rey es desconocida. Se le aproxima un duro calendario frente a rivales directos y entre ellos se entrometen los dos encuentros ante el Villarreal. Compaginar ambas competiciones no es una labor asequible y todos son conscientes de ello. Forzar a los jugadores más importantes de la plantilla supondría un duro peso sobre sus piernas y no se puede permitir contar con más bajas.
Una prueba más
Por su parte, el Villarreal afronta todavía un calendario más complejo. Vivo en tres competiciones, a priori, la Copa es la menos importante. A pesar de lograr alcanzar las semifinales hace tres temporadas, nunca ha tenido buenas actuaciones en ella. El conjunto de Javier Calleja cuajó dos actuaciones sensacionales frente a Celta de Vigo y Valencia tras superar un ligero bache en el que estuvo involucrado el Leganés.
Con un once inicial bastante completo, el fondo de armario es un tema frágil para el submarino amarillo. La cantidad de lesiones que ha afrontado a lo largo del curso le han jugado una mala pasada. Se han visto obligados a depender de jugadores del filial, los cuales no rendían como se esperaba y los resultados no siempre acompañaban. Bruno, una de las piezas más importantes, está a punto de retornar de una grave lesión y será sin duda alguna la mejor noticia para el equipo.
Un único precedente copero
La historia entre Leganés y Villarreal siempre ha sido muy igualada. Apenas hay diferencia en cuanto a victorias repartidas entre Primera y Segunda División. El Villarreal con 6 victorias y el Leganés con 5 son una muestra de ello, acompañados de 4 empates.
Sin embargo, únicamente se han visto las caras en Copa del Rey en una ocasión. Fue en la temporada 1999/2000 cuando en primera ronda ambos equipos se enfrentaron con final feliz para el conjunto amarillo. El Leganés partía con una mínima ventaja del partido de ida, pero el Villarreal no cedió en la vuelta y venció por 0-3 en Butarque.
Sánchez Martínez dirigirá el encuentro
El colegiado del comité murciano será el encargado de arbitrar el encuentro entre Leganés y Villarreal. Su última actuación tuvo lugar en el Santiago Bernabéu, donde dirigió el clásico. Esta temporada todavía no se ha cruzado con los equipos protagonistas del partido en Butarque, por lo que será su primera vez ante ambos.
Fue en la temporada 1999/2000 cuando en primera ronda ambos equipos se enfrentaron con final feliz para el conjunto amarillo. El Leganés partía con una mínima ventaja del partido de ida, pero el Villarreal no cedió en la vuelta y venció por 0-3 en Butarque.
Posibles onces