El Córdoba vuelve al Arcángel con una derrota después su visita a Los Pajaritos. La pérdida de tres puntos valiosos para el equipo y posible salvación, hacen que el conjunto andaluz plantee su próximo encuentro de forma distinta. Edu Ramos, el capitán del Córdoba CF, habla en rueda de prensa sobre la derrota y el próximo partido del equipo.

 “Nosotros estamos trabajando para conseguir siempre los tres puntos aunque la semana pasada no lo conseguimos. Ahora tenemos que pensar en nosotros y ganar ante el Lorca en casa” declara el capitán. “A partir del martes vimos el partido con el Numancia para corregir los errores y a partir de ahí pensamos solo en el Lorca. Todos los entrenos los enfoca al equipo rival, pero también en nosotros” añade Edu Ramos. El Arcángel vuelve a ser el escenario de la próxima gesta del Córdoba, quien debe ganar si quiere acercarse al sueño de la salvación. 

A pesar de la derrota, el equipo se encuentra mejor de ánimo que nunca: “Hemos conseguido cuatro victorias. Esto da confianza y trabajamos fuerte cada semana, estamos unidos y estamos convencidos de que va a salir bien” comenta el centrocampista quien ya tiene en mente que el equipo siga aumentando esa cifra. “Pero ahora lo crucial es ante el Lorca, están ahí abajo y si ganamos damos un golpe sobre la mesa, nos podemos poner a 2 puntos” declara el jugador. 

El entrenador del Córdoba, José Ramón Sandoval, ha inculcado al equipo la mentalidad de jugar todos los partidos como si fueran finales, y el capitán lo tiene bien aprendido: ”Tenemos que ir partido a partido, aunque sea mítico, pero es lo más importante. Esta semana es una final para nosotros” zanja el jugador. El técnico califal, además se encuentra en la búsqueda de un compañero en el campo para el capitán: “me gusta más un jugador de otro perfil distinto al mío, pero siempre que me ha tocado jugar con un perfil parecido nos hemos congeniado” comenta Edu Ramos.

El capitán y el resto del equipo tienen la difícil tarea de mantener el sueño de la salvación vivo. Será ante el Lorca, cuando se pueda comprobar que el camino ascendente del Córdoba no se ha parado tras el último tropiezo.