Hace tiempo que el Real Madrid dejó de tener bestias negras y territorios malditos en Europa. Hasta hace bien poco, Alemania era un lugar prohibido para el conjunto blanco. Ya rompió esa maldición con creces contra todos los rivales posibles.

Pero en esta Champions llegaba a uno de esos estadios en los que la victoria se dificulta por diez. El Juventus Stadium es un bastión casi inexpugnable. Un campo dominado por completa por el equipo local y que se convierte en un verdadero infierno para cualquier equipo que lo visita. Turín seguía siendo una de las ciudades más dificultosas para los madridistas.

Sin embargo, este equipo va camino de leyenda y parece que nada puedo interrumpir su progreso. Una de las defensas más férreas de Europa en uno de los estadios más difíciles del continente y el partido acabó 0-3. Gracias a este espectacular triunfo, el Real Madrid se ha convertido en el séptimo equipo en sacar algo positivo de Turín.

Anteriormente, tan solo lo habían conseguido Inter, Sampdoria, Bayern, Fiorentina, Udinese y Lazio. El dato más escalofriante es que, esas seis derrotas (siete se si cuenta la del Madrid) han llegado en un total de 179 partidos en el Juventus Stadium. De esa friolera de encuentros jugados como local, la Juve tan solo ha perdido siete.

Lo que hace este hito más sorprendente aún, es la forma en la que se logró la victoria. Con una goleada por 0-3, que pudo ser más abultada, y con una superioridad aplastante que dejó una sensación de impotencia pocas veces sentida en la piel Juventina.

Una sensación que se materializó en esa ovación de rendición y de reconocimiento que los aficionados le tributaron puestos en pie a Cristiano Ronaldo tras uno de los mejores goles de la historia de la Champions. Es el primer equipo en ganar por más de dos goles en este estadio.

Otra barrera más rota por este equipo que parece casi invencible cada vez que pisa territorio europeo. No hay rival ni estadio que se le resista a este Real Madrid que vence en los lugares más difíciles del continente.