Duro revés para las aspiraciones de la Formentera que volvió a complicarse la vida una vez más antes los suyos. Enfrente, un Sabadell muy serio y contundente que dio un paso de gigante hacia la salvación en un partido atípico dentro del habitual guión arlequinado con más de dos goles en su casillero por primera vez en la presente campaña.
Arranque novedoso
El partido comenzaba repleto de tensión en ambas plantillas. Se podía palpar con facilidad. No era un partido más, se notaba también entre las gradas, con un gran ambiente entornado hacia la necesidad por los tres puntos del equipo local.
También comenzó con algo que pocos esperaban, con goles. Dos plantillas con faltas de gol terribles que les han lastrado hasta su precaria situación actual y que veían puerta en menos de 20' de juego. Primero golpeaban los arlequinados, en el minuto 7' del choque, tras una gran maniobra dentro del área de Arturo que, muy inteligentemente, sirvió en bandeja el cuero para que Felipe la mandara a las mallas (0-1).
Felipe golpeaba primero y Ramón Soria igualaba
Duro varapalo inicial para los de Juan Arsenal que, lejos de hundirse, se espolearon con él. Hasta dos ocasiones disfrutaron tras el gol de Sanchón: un disparo lejano de Quesada y una clarísima oportunidad a balón parado con un testarazo a bocajarro de Garmendia que sacó Roberto como pudo. Ya rozando la veintena de minutos de juego, llegó la igualada para los pitiusos y, cómo no, a balón parado: Ramón Soria botaba una falta lateral y la mandaba al palo largo inalcanzable para Roberto (1-1).
Nada más conseguir la igualada, los de Toni Seligrat se encargaron de dejar bien claro que seguían ahí dejando la mejor ocasión que habría hasta el descanso. Internada por derecha de Sanchón que acababa con un centro a Josu quien, con el exterior de su zurda, disparaba a centímetros de la escuadra de Marcos Contreras.
La segunda mitad continuó con un dominio alterno y ritmo muy alto, con dos equipos a los que no les valía el empate. Rozando el intermedio, el Formentera volvió a dejar su sello en un córner, esta vez con un intento de 'gol olímpico' del siempre peligroso Nando Quesada que acabó rozando el palo de Roberto.
Paso al frente del Sabadell
La segunda mitad la arrancaron con mucho hambre los hombres de Toni Seligrat. La charla en el vestuario pareció surtir efectos y apenas tres minutos después de la reanudación vieron puerta: balón parado botado por Marc Martínez, horriblemente defendido por la zaga pitiusa, y Migue García anotaba libre de marca (1-2).
Migue García castigaba una mala salida de vestuarios del Formentera
En esta ocasión, el gol sí que afectó a los baleares, que se veían indefensos ante la ofensiva de un Sabadell que siguió atacando con el impulso del gol. En el 61', tuvo la sentencia un omnipresente Arturo con un duro disparo que atajó abajo Marcos Contreras.
Con el paso de los minutos, la SD Formentera se fue enderezando y entrando en juego a ritmo de largas posesiones con las que calmaron los ánimos arlequinados. En el 69', llegó una de las jugadas claves del partido con una doble ocasión local en el enésimo balón parado rojillo: centro envenenado de Quesada que acabó en el palo y cuyo rechace no acertó a anotar Samu con un débil cabezazo a las manos de Roberto.
Arturo sentencia en pleno asedio pitiuso
Tras esa gran oportunidad, llegaron los mejores minutos de los de Juan Arsenal con un absoluto acoso de centros laterales hacia el área del Sabadell. Uno y otro ataque por banda derecha con las incorporaciones de Fobi, con Crespo desbordando y con las caídas del Bruno. Precisamente el brasileño pudo empatar a falta de 20' para el final con un cabezazo desviado.
Los pitiusos se volcaron hacia la meta de Roberto y Arturo castigó a la contra
Con el Formentera absolutamente volcado, Arturo aprovechó una de las contras para matar el partido con una jugada individual en la que sentó por velocidad a Bonilla primero y a Marcos Contreras después, para terminar empujando el cuero a puerta vacía (1-3). Perfecto broche a una actuación decisiva del ariete de Cartagena.
Cuando el partido parecía estar ya cerrado, el orgullo del Formentera llegó a presentar una nueva opción para meterse de lleno a por el empate con un torpe penalti de Aleix sobre Gabri. Pero Roberto frenó las ilusiones formenterenses adivinando el flojo lanzamiento de Juan Antonio.
Con ese penalti se esfumaron ya por completo las opciones de un Formentera que perdía una así una importantísima batalla por su guerra de la permanencia. El Sabadell, paso al frente clasificatorio y permanencia virtualmente sellada.