El conjunto che ha ganado dos partidos durante la pretemporada; sin embargo, ha empatado otros dos y ha perdido frente al PSV, uno de los mejores equipos holandeses. Por ello, las sensaciones son buenas, pero podrían ser mejores.
Durante la estancia en Suiza, el equipo valencianista trabajó la posesión, el ritmo de balón rápido y, sobre todo, ser un grupo unido y dinámico. Las nuevas incorporaciones, a falta de dos posibles fichajes, parece que han encajado en el equipo. Entre ellas, destaca la experiencia de Wass procedente del Celta y la brillantez de Diakhaby.
Actualmente, el Valencia está realizando sesiones preparatorias de cara a la próxima campaña en la que les espera un calendario realmente complicado.
Los primeros meses de competición
Los de Marcelino tendrán que superar los primeros meses de competición al máximo nivel posible, ya que en un par de semanas conocerán sus rivales en la Champions League.
El club che se enfrentará en el primer partido de liga al Atlético del Cholo Simeone, la primera piedra en el camino. La temporada pasada únicamente consiguieron sacar un punto en ambos partidos, es decir, el club madrileño y, sobre todo, Simeone, tienen estudiados al Valencia. Aunque no todo son malas noticias, ya que el primer partido se jugará en Mestalla. Por ello, el Valencia contará con el apoyo de su afición e intentará sacar los tres puntos ante un rival directo que vendrá bajos mínimos tras disputar la Supercopa de Europa ante el Real Madrid.
Posteriormente, irán a Cataluña para enfrentarse al Espanyol, un rival a priori inferior que no deberán tener problemas para conseguir, al menos, un punto. Después, jugarán el derbi valenciano ante el Levante, también fuera de casa, por lo que los de Marcelino tendrán dos partidos clave en menos de un mes.
De septiembre a octubre, el gran infierno
En el transcurso de septiembre a octubre, el Valencia jugará contra el Villarreal, Celta de Vigo, Real Sociedad, Athletic de Bilbao, Barcelona y Leganés. Seis partidos que se presentan totalmente determinantes en el inicio liguero en los que al menos deberán obtener entre 12 y 13 puntos. A priori tanto el Barcelona como el Villarreal podrían ser derrotas permitidas para el conjunto valencianista, pero ya se conoce el carácter de Marcelino; el técnico asturiano no querrá darse por vencido e intentará sacar los 18 puntos.
En noviembre llega la calma
La afición che podrá estar relajada durante el mes de noviembre, ya que el Valencia tendrá tres partidos sencillos en los que no sacar nueve puntos sería un gran fracaso. Getafe, Rayo Vallecano y Girona, tres rivales de la parte inferior de la tabla pero que siempre compiten al máximo nivel y querrán seguir en la Primera División española. Por ello, Marcelino irá a muerte pero quizás intente realizar diversas rotaciones para no acumular cansancio en los futbolistas más titulares, ya que la Champions es una competición muy exigente y todo el grupo debe estar en forma.
La Champions League, sinónimo de grandeza
La temporada pasada el Valencia de Marcelino consiguió una plaza para la máxima competición europea tras colocarse cuarto en la liga española. Por delante, se situaron el Barcelona, el Atlético y el Real Madrid, tres rivales contra los que peleó hasta la última jornada.
El 29 de agosto, tras finalizar los playoff de clasificación, se darán a conocer los rivales de la fase de grupos. Posteriormente, el 18-19 de septiembre arrancará la competición que todos los equipos desean jugar. El Valencia no podrá enfrentarse a ningún club español, pero lo más seguro es que se vea las caras ante algún equipo de la Premier League o la Ligue 1.
Marcelino tiene en mente pasar la fase de grupos pero necesita al menos un lateral derecho, ya que días atrás se hizo oficial la cesión del Chelsea de Batshuayi. Por lo tanto, marcará los objetivos necesarios y se pondrá manos a la obra con el grupo, preparando lo que será una temporada histórica.