El Vejer Balompié cumple 50 años, y que mejor manera de celebrarlo para un conjunto y localidad de la provincia que invitando al equipo que mejor la representa, el Cádiz CF. El estadio Manuel Guerrero Soriano "El Mocito" hizo de anfitrión en esta efemérides tan señalada e invitó al conjunto de la capital para un encuentro que lógicamente no tendría mayor trascendencia que ir probando a los menos habituales para coger ritmo.
En un partido sin relevancia y donde la intensidad brilló por su ausencia, no deja de ser llamativo que el equipo profesional no haya sido capaz de perforar las mallas de un equipo que milita en Primera Andaluza, si bien hay que indicar que los visitantes dispusieron de algunas ocasiones claras para haber inaugurado el marcador en algún momento del encuentro.
El equipo local realizó un partido muy serio y pese a ser un encuentro entre rivales de categorías muy dispares, el Vejer hizo que esa supuesta diferencia entre categorías quedara reducida. Por su parte, el Cádiz controló el partido y dominó la pelota, pero la falta de acierto que ya ha demostrado a lo largo de la temporada en otras ocasiones volvió a hacerse patente en este duelo.
Si sacamos algunas conclusiones, siempre desde la relativa importancia que podría tener un partido de esta índole, podemos hablar de lo positivo y lo negativo. En contra podemos ver que sin duda, es una oportunidad desperdiciada para algunos de los jugadores menos habituales para reivindicarse, sobre todo del ataque. A favor tendremos en cuenta la inclusión de varios jugadores que venían arrastrando lesiones como Romera o Kecojevic, que así pueden ir cogiendo ritmo competitivo, además de la inclusión como ya ha pasado también en Copa de algún jugador del filial que tan buen papel viene ofreciendo en las últimas temporadas.