No vale la excusa del entrenador

El problema parece ser mucho más profundo que culpa del entrenador. Lopetegui, Solari y ahora Zidane han sufrido los mismos problemas. Un equipo falto de actitud en algunos momentos y, con jugadores fuera de forma o faltos de ritmo que no están dando el nivel de un equipo de primera división y mucho menos del Real Madrid. El equipo blanco debe aspirar siempre a ganarlo todo. Sin embargo, esta temporada han estado muy lejos de ganar cualquiera de los títulos posibles. Zidane tiene mucho trabajo por delante y cada vez más incógnitas por resolver de cara a la próxima temporada.

Primera media hora de tanteo

Ambos equipos comenzaron queriendo imponer una presión a la salida de balón del contrario y siendo incapaces de crear ellos peligro. Apenas hubo nada destacable en la primera media hora de juego, sólo un disparo desde la frontal de Toni Kroos que atajó Neto sin inconvenientes. El primer disparo a portería del Valencia fue gol, Keylor despejaba de puños un saque de esquina en vez de blocar el centro ché. En la segunda acción estuvieron demasiado pasivos los jugadores blancos, Guedes se paró en la frontal y colocó el cuerpo y el pie cómo si fuera a chutar al palo más lejano, pero finalmente engañó a Keylor (igual que al resto) y mandó el balón al otro lado.

El gol cambió la versión del conjunto valencianista

Tras adelantarse, el Valencia fue un equipo distinto. El gol dio alas al conjunto de Marcelino que terminó la primera mitad acosando al Real Madrid, pero fue incapaz de marcar el segundo tanto y el equipo de Zidane pareció abatido. Incapaz de reaccionar ante tal adversidad. Los blancos llevan todo el año perdonando en el área rival y cometiendo errores graves en el área propia. Este partido ha sido la representación de la temporada. Un partido gris que en otros años se sacaba adelante y que actualmente son incapaces de hacerlo.

En la segunda mitad el equipo blanco intentó reaccionar y remontar, pero fue incapaz de acercarse con peligro a la portería de Neto. Odriozola lograba incorporarse por la banda derecha, aunque sus centros no encontraban nunca rematador. Zidane decidió dar entrada a Isco y Bale por Asensio y Kroos. El equipo consiguió acercarse y crear más peligro, pero sin materializarlo. Además, el Valencia lograba mediante el contraataque acercarse a la portería de Keylor. Carlos Soler tuvo el 2-0, pero el exceso de generosidad de los atacantes impidió que llegase.

El entrenador francés quemaría todas sus naves dando entrada a Mariano por Lucas Vázquez. Sin embargo, pocos minutos después, Garay hacia el segundo en un remate impecable de cabeza a un gran saque de esquina de Parejo. El Real Madrid hincaba la rodilla después de estar a punto de hacerlo el pasado domingo en el Santiago Bernabéu frente al Huesca. Al final, de tanto jugar con fuego, se han acabado quemando. La vuelta de Zidane es muy positiva pero no hace milagros. Tan sólo Benzema consiguió recortar distancias, pero eso ya fue en el último minuto. Demasiado tarde para buscar la victoria o el empate.

Renovación de plantilla

El Valencia se acerca a su objetivo de la Champions League. Los madridistas por su parte se siguen hundiendo en este pozo sin fondo que es la temporada. Sólo hay ganas de que termine de una vez para que el próximo proyecto pueda echar a andar. La renovación de la plantilla debe ser una obligación y no se pueden volver a cometer los mismos errores. Hay jugadores a los que se les ha acabado el crédito. Jugar en el Real Madrid es mucho más que hacerlo en otro equipo. Es donde la mayoría de futbolistas sueñan con jugar, pero si estos jugadores no comprenden esa situación y el privilegio que supone, es el momento de que den el paso definitivo a un lado.