El Real Madrid no pudo pasar del empate en un partido donde los dos conjuntos hicieron un enorme encuentro, ambos se dejaron todo lo que tenían para intentar ganar, pero finalmente ninguno de los dos lo pudo conseguir.

El Real Madrid empezó perdiendo el partido con un gol tempranero del Celta de Vigo, pero, posteriormente consiguió darle la vuelta, el partido se encaminaba hacia una victoria madrileña, pero en el minuto 85 Santi Mina iba a poner el dos a dos final.

Los aficionados del Real Madrid no pueden irse descontentos, puesto que el conjunto local realizó un encuentro muy bueno, que el partido acabarán empate no es demérito de ninguno de los dos equipos, sino mérito.

Una buena noticia a destacar en el conjunto madrileño fue la vuelta de Edén Hazard, que realizó un gran encuentro. Zidane intentó probar, ya en la segunda parte, una alineación en la que Mendy era el lateral izquierdo y Marcelo estaba un poco más adelantado, como extremo izquierdo, aunque esta táctica del míster francés no surgió efecto ya que no pudieron vencer el encuentro.

Cuando quedaban pocos minutos del partido Zidane quitó al alemán Toni Kroos para dar entrada a Luka Modrić y, quizás, fue éste cambio el que rompió un poco la estructura central del Real Madrid. Ya que el croata es un jugador de perfil más ofensivo que Toni Kroos, pero como se mencionaba anteriormente no fue demérito de ninguno de los dos equipos ya que ambos hicieron un encuentro formidable. Tanto es así que cuando acabó el partido muchos de los futbolistas se tiraron al suelo, ya que ninguno estaba satisfecho con ese empate. También fue buena muestra de todo lo que habían dado sobre ese césped y el cansancio que tenían. Se llegó hablar incluso de una oda al fútbol en este partido.