La marcha en el verano de 2018 de Cristiano Ronaldo dejó un vacío en la estructura del Real Madrid a nivel deportivo que no se ha llenado desde entonces. Unas declaraciones tras la conquista de la Décimotercera Copa de Europa del club blanco anticipó el adiós del máximo goleador de la historia. Desde ahí, sólo una Liga y una Supercopa de España con la perspectiva para triunfar este año muy a la baja.

Florentino Pérez dio el visto bueno a la venta del astro a la Juventus, en lo que puede haber sido su mayor error en sus casi 20 años de mandato. Viendo el rendimiento en ataque partido a partido y el nivel de Cristiano que no baja en sus cifras goleadoras, más de un dirigente se echará las manos a la cabeza pensando en lo que dejaron salir.

Solo Benzema aguanta el tipo

Para compensar la salida de CR7, se confió en un primer momento en Gareth Bale, otra apuesta errónea, un tremendo fracaso, que ha vivido entre lesiones y polémicas. Ahora en Inglaterra, a donde marchó para relanzar su carrera, es un estorbo para Mourinho en el Tottenham (a pesar de las alabanzas iniciales y los recados al Madrid que el portugués dejó en rueda de prensa).

En verano de 2019 llegó Hazard desde el Chelsea, lo cual parecía un acierto en la política de fichajes. Año y medio después, el belga ha anotado únicamente cuatro goles y ocupa más tiempo la enfermería que las convocatorias de Zidane, en una espiral de difícil solución para el belga. Jovic, el otro gran fichaje en la delantera, ha salido por la puerta de atrás cedido al equipo del que llegó, el Eintracht ​​​​ Frankfurt.

La única noticia buena ha llegado del '9', que se destapó a nivel goleador para sostener al Madrid y llevarlo incluso a conseguir una Liga en 2020, ayudado por jugadores que no constan los goles en sus principales virtudes como Ramos o Casemiro. Sin llegar a las cifras de Cristiano, Benzema se ha colado en la lucha por ser el Pichichi de LaLiga Santander.

Cerca de renovar con la Juventus

A pesar de los rumores que han situado al portugués fuera de Turín, incluso con una hipotética vuelta a Madrid, ahora mismo hay muchas opciones de que continúe en la Vecchia Signora más allá de 2022, que es cuando acaba su contrato. Jorge Mendes, su inseparable representante, ya se ha sentado con los dirigentes italianos para extender el vínculo.

Como ha dado a entender en entrevistas, la intención de Ronaldo es jugar hasta los 40 mínimo. El extremo cuidado físico al que se somete, aunque es cierto que ha perdido velocidad punta, ayuda a que se pueda mantener en la élite unos años más sin perder prestaciones. De hecho, ocupa la primera posición en la tabla de goleadores de la Serie A y es sexto en la carrera de la Bota de Oro.