Gonçalo Paciência es nuevo jugador del Celta tras la caída del fichaje de Borja Mayoral, que volverá al Getafe, pero en propiedad, alegando su paternidad como argumento para quedarse en Madrid. Presumiblemente, será un jugador clave en las primeras jornadas tras la falta de delanteros en el club celeste, a la espera de una apuesta fuerte donde toman forma jugadores como Pavlidis (delantero del AZ Alkmaar holandés) y Bakambú, este último esfumándose la opción, ya que quiere jugar Champions League con el Olympique de Marsella, su actual club. A su vez, el Celta comunicó este viernes la marcha de Sergio Carreira al Villarreal B en forma de cesión con una OdC de 10 millones, quedando el club con Kevin Vázquez y Hugo Mallo.
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Estilo de juego
Paciência no es un jugador muy alto de estatura (1.84 metros), pero que remata muy bien los balones aéreos, donde su fuerte también es su buena definición tanto dentro como fuera del área. Uno de los aspectos a destacar del portugués, es su juego entre líneas, encontrando los espacios oportunos para la arrancada, pillando a la defensa desprevenida y con una fortaleza en los 1vs1. A nivel estadísticas, Gonçalo nunca fue de llevarse al saco una renta grande de goles, siendo su mejor temporada la 19/20 con 10 goles y 1 asistencia en 44 partidos con el club alemán, jugando la mayoría de los partidos de titular. También es un asiduo en las convocatorias de la selección portuguesa, partiendo siempre desde el banquillo y sabiendo que tiene por delante a jugadores como Cristiano Ronaldo. Con el Eintracht ganó la Europa League de la 21/22 sin ser protagonista en las alineaciones, como en el resto de la temporada en DFB Pokal Bundesliga.
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Su aportación al Celta
En el Celta tendrá mucho protagonismo en las primeras jornadas tras la falta de delanteros en el club, y se están buscando jugadores con unas estadísticas y aptitudes mejores que las de Paciência, pero llevará tiempo, y con seguridad hasta el fin de mercado que es el 31 de agosto. En ese tramo de tiempo tendrá tres partidos, dos en casa ante el Real Madrid y Espanyol y otro fuera de casa contra el Girona en Montilivi. Será pareja de ataque con el incombustible Iago Aspas y puede explotar sus fortalezas en una liga donde se caracteriza con las mismas características de líneas defensivas que la Bundesliga, donde se puede reivindicar y pelearle el puesto al nuevo delantero que está por venir y que a día de hoy no se sabe quien será. Hay que decir que fue una apuesta de la dirección deportiva, ya que las apuestas de Coudet son Marchesín y Carles Pérez.
