El mejor ataque, es una buena defensa

El Real Madrid extiende su racha de porterías a cero a cuatro encuentros después de la victoria frente al Celta de Vigo. La solidez defensiva está siendo clave en los éxitos del conjunto madrileño esta campaña.

El mejor ataque, es una buena defensa
Los jugadores del Real Madrid celebrando un gol frente al Celta | Foto: Realmadrid.com
joselopezgmz
Por José López

El Real Madrid está siendo muy fuerte defensivamente durante este casi redondo mes de abril. Los blancos no han encajado ningún gol durante los últimos cuatro encuentros, siendo esta la primera vez que lo logran durante la temporada 2022/23. Curiosamente, ha sido el mismo resultado (2-0) el que se ha repetido en los cuatro últimos partidos frente a Chelsea en ida y vuelta, Cádiz y Celta.

Una profundidad de banquillo envidiable

El Real Madrid es uno de los equipos más fuertes a escala mundial. El éxito de un equipo a lo largo de una temporada reside en la capacidad de mantener un ritmo constante y no decaer durante períodos en los que se precise de rotaciones. Los merengues tienen un banquillo que puede dar el nivel necesario para llevarse los tres puntos en partidos en los que los once hombres de siempre necesiten descansar.

Empezamos desde la portería con una de las piezas claves del Real Madrid. Thibaut Courtois es un portero de clase mundial, a criterio de muchos el mejor del mundo, (aunque no el de la FIFA que eligió a Emiliano Martínez), pero lo realmente importante es que ha salvado innumerables veces a los merengues de goles a priori cantados. La altura y la agilidad del belga hacen de él un guardameta excelente que cualquier club en el mundo desearía tener. Gran parte de la imbatibilidad de los madridistas está a su nombre.

Los cuatro centrales del Real Madrid son Rüdiger, Militão, Nacho y Alaba. Todos han demostrado tener el nivel necesario y saber cumplir las órdenes de Carletto a la perfección, a excepción del Real Madrid – Villarreal en la que la pareja Rüdiger-Alaba no consiguió mantener la portería a cero (2-3).

Rdiger con el balón | Foto: Realmadrid.com
Rüdiger con el balón | Foto: Realmadrid.com

Este mes de abril, el Real Madrid no ha tenido una pareja de centrales por excelencia. A principios de mes parecía que Rüdiger y Militão iban a seguir ocupando el puesto de centrales, lo que restaba de temporada, pero la lesión del alemán ha dejado hueco a Alaba, que a pesar de su perfil más ofensivo, ha sabido adaptarse y mantener la compostura en un puesto de suma dificultad.

En los laterales la situación parece estar mejorando progresivamente en lo que hasta mitad de temporada parecía un drama, pero finalmente las bandas blancas se han reactivado y de nuevo están a la altura del resto de la zaga madridista.

Comenzando por la diestra, son Carvajal y Lucas Vázquez los dos laterales que ocupan esta posición. Dani Carvajal parecía haber bajado el ritmo durante la campaña, pero como es costumbre en el leganense, llega el mes de abril y vuelve a encontrarse en el estado de forma que tenía en la época de las tres Champions. Su compañero, Lucas Vázquez, es al igual que como habíamos mencionado de Alaba, un perfil más ofensivo que de hecho llegó al Real Madrid como un extremo ofensivo y no un lateral, pero aun así, el de Curtis no está cuajando una mala temporada y cumple cuando es necesario. Ha habido veces que hemos visto a Ancelotti optar por Nacho si no es posible la presencia de ambos laterales o no se encuentran al 100%, pero éste ha sabido cumplir y no ha presentado ningún problema o debilidad significativa más que los típicos de un cambio de posición.

Siguiendo por la siniestra, en esta banda ha habido siempre mucha variación. El lateral titular era Ferland Mendy, pero su baja hasta principios de mayo ha abierto la veda y últimamente estamos viendo novedosos sistemas de juego para adaptar al equipo a su falta. Sorprendentemente, Ancelotti ha decidido que la mejor opción es la de Camavinga en el lateral. El francés es un todoterreno y su potente físico es clave para que se pueda adaptar a cualquiera de las posiciones en las que el técnico italiano decida colocarle. A falta de Camavinga, los centrales Alaba y Nacho también han sido opciones que han dado resultados bastante positivos a los vikingos.

Haciendo una síntesis, el mejor ataque es una buena defensa, y cuando tienes a tantos hombres polivalentes y que permiten que haya el número de bajas que haya el equipo se presente con una defensa competitiva, el éxito está casi asegurado.