Espanyol y Alavés se veían las caras en un encuentro atractivo. Los 'pericos' quería seguir soñando con los puestos europeos, mientras que el 'Glorioso' trataría de reencontrarse con las buenas sensaciones perdidas tras las dos derrotas consecutivas en Liga.
Los antecedentes no eran buenos, pues los catalanes vencieron en el encuentro de ida en Medizorroza por 0-1. Por tanto, Pellegrino ya conocía cuáles eran los puntos flacos de su equipo ante este rival y qué tenía que cambiar para frenar el 4-4-2 con dos puntas de Quique Sánchez Flores.
Cambio de sistema
El Alavés salía con tres centrales y dos carrileros largos, Toquero era el sacrificado. Pellegrino conocía del peligro de los dos puntas del equipo catalán y utilizó como antídoto este nuevo sistema. Volvían Manu García y Llorente al doble pivote.
Comenzaba el encuentro con un Espanyol que quería dominar la pelota y salir desde atrás con el balón jugado. Fruto de ello, el Alavés trató de presionar arriba y estuvo a punto de robarla en una zona peligrosa en el minuto dos. Muchas alternativas en el juego. En el minuto 14, Gerard Moreno se hacía un hueco en la banda y se internó por el centro dirección portería. Su tiro desde fuera del área fue atrapado por Pacheco sin complicaciones, pero se atrevían los 'pericos'.
El resumen de los primeros minutos era claro: el Alavés trataba de mantener la pelota, pero la forma con la que creaba peligro era la presión alta y recuperación en campo rival. En ese dilema estaban los de Pellegrino.
El encuentro se basaba en llegadas por banda y centros al área, y latigazos desde lejos que se iban desviados. Lo intentaba Aarón Martín en el 21' desde la izquierda, pero se marchó alto. Empezaba a animarse el equipo local. Caicedo gozó de una gran ocasión, dándose la media vuelta en el área y disparando contra el defensor. Se hacían con el encuentro los de Sánchez Flores en los primeros 25 minutos.
Pocas oportunidades claras en la primera mitad
Deyverson se empezaba a calentar. Subían las pulsaciones y el ariete alavesista intercambiaba palabras con varios futbolistas del equipo catalán. También empezaba a calentarse Jurado, pero no precisamente en lo extrafutbolístico. El centrocampista del Espanyol realizó una gran jugada en el minuto 35, pero su pase atrás dentro del área no llegó a nadie. Un minuto después, su centro al área fue rematado por Piatti sin éxito.
La respuesta, un disparo de Camarasa al primer toque tras gran acción combinativa. Feddal se la dejó de cara y el centrocampista no se lo pensó. Fruto del ansia con el que golpeó el cuero, el balón se marchó alto. Finalizaba la primera mitad sin grandes ocasiones pero con muchos intercambios, y alternancias en la posesión y las llegadas. Orden y rigor defensivo para mantener el 0-0 en el electrónico. Jurado, el más activo del encuentro.
Los locales, a por todas en la segunda mitad
Comenzaba la segunda mitad, y el Espanyol salía con otra marcha más. Salieron del vestuario con ganas de meter un gol pronto, y Gerard Moreno gozó de la ocasión más clara del partido. El balón quedó muerto en el área y el ex del Villarreal, con la zurda, la mandó arriba. Respiraba Pacheco, que se había quedado vencido.
En el minuto 56 llegaba el primer tanto del encuentro. Falta colgada a la olla por Víctor Sánchez, que no remató bien David López. No obstante, su golpeo con el costado resultó ser una asistencia a Piatti, que sólo tuvo que empujarla. Se adelantaban los locales, que lo estaban mereciendo en este arranque de segunda mitad.
Entró Baptistao por Caicedo en ese mismo instante, y no necesitó ni un minuto sobre el césped para gozar de una gran ocasión que atrapó Pacheco. El Alavés iba desapareciendo. Los locales dominaban, y los de Pellegrino no conseguían revertir la situación. Pellegrino buscó un cambio de planes. Dio entrada a Vigaray y Óscar Romero en lugar de Kiko y Ely. Volvía a la defensa de cuatro en introducía a un jugador de calidad como el paraguayo.
En el 77 pudo sentenciar el equipo local. Otra vez Leo Baptistao a asistencia de Gerard Moreno, pudo poner el segundo en un mano a mano que acabó atajando Pacheco. El partido se fue diluyendo y el Alavés veía como sus opciones de conseguir un punto en el RCD Satdium se esfumaban. Óscar Romero trataba de aportar otro aire al equipo, pero aún así no se pudo consumar la remontada. Derrota importante que deja tocado a los de Pellegrino, que acumulan tres derrotas consecutivas. Mal nivel ofrecido por el conjunto vasco, al que el nuevo sistema no le funcionó.