Haciendo honor a su historia. El Real Madrid ha completado una primera vuelta casi perfecta después de conseguir 14 victorias, cuatro empates, y tan solo una derrota. Los blancos se enfrentaban al Málaga para terminar el primer tramo de la competición (todavía queda enfrentarse al Valencia en Mestalla) y doblegaron a los andaluces con un doblete del hombre de moda en Concha Espina, Sergio Ramos. 

48 goles a favor, 17 en contra, y 43 puntos avalan a un conjunto que ha liderado La Liga desde prácticamente el primer mes de campeonato, y que ha mantenido el paso firme durante toda la campaña. Es cierto que tan solo le separa un punto del Sevilla y tres del Barça, pero logrando el triunfo que le resta por la disputa del Mundial de Clubes en el mes de diciembre, conseguiría ampliar dicha ventaja.

Esta es la 35 ª vez que los merengues consiguen ser campeones de invierno, llegando a ser los ganadores del torneo en 23 ocasiones de las mismas. Está claro que el gran objetivo de los de Zidane esta temporada es lograr un título que se les ha resistido durante los últimos ocho años (tan solo "la liga de los récords", conseguida por el Madrid de Mourinho en 2012,  es el recuerdo de los madridistas del pasado lustro).

Eso sí, los blancos no deben de confiarse, pues después de haber alcanzado la mayor racha de imbatibilidad de la historia del fútbol español (40 partidos), han caído derrotados de forma consecutiva ante Sevilla (2-1) y Celta (1-2 en Copa del Rey). Incluso sufrieron más de lo previsto contra el Málaga en la tarde del sábado. En definitiva, una primera vuelta espectacular, que será muy difícil de batir y que deberá esperar la mejor cara del Real Madrid si quiere, por consecuencia, conseguir su 33ª Liga.