Con más de 2000 partidos oficiales como visitante a sus espaldas, el Real Madrid sabe lo que es convivir con la presión y el ambiente que le generan sus rivales cada vez que los visita. Todos quieren vencerle. Pero muy pocos son los afortunados de lograrlo. Es por ello que resulta curioso, que sabiendo la gran cantidad de encuentros que ha ganado el conjunto de Chamartín fuera de su feudo, y conociendo la gran capacidad goleadora y dominadora de sus futbolistas, solo se hayan producido cuatro "3-5" en la historia del club merengue.

El último ayer, en el Benito Villamarín. Y llegó casi sin querer, pues a falta de diez minutos, el electrónico dibujaba un 2-4 que parecía inamovible dado el control que mantenía el equipo de Zidane y el cansancio que reflejaban los verdiblancos. Pero un gol de Sergio León, y otro de Karim Benzema en el último minuto, provocaron la llegada de un resultado que no vivía el Real Madrid desde hace más de 50 años, cuando en 1960 logró vencer al FC Barcelona por ese mismo marcador. Previo a ello, también lo hizo contra el Real Murcia en 1945, y el Unión Sporting en 1919. 

Lo cierto es que hace unos dos meses, habría resultado difícil de predecir que los blancos lograrían anotar cinco tantos lejos del Bernabéu. La falta de gol empezaba a convertirse en un problema muy a tener en cuenta. No obstante, eso ya es pasado. Entre la clara vocación ofensiva de las escuadras de Quique Setién (y los espacios defensivos que eso conlleva) y la racha goleadora que sorprendentemente están disfrutando los Cristiano, Asensio, Bale y compañía, se dio un resultado atípico para la hemeroteca merengue. Eso sí, vaya disfrute para el espectador cuando pasa eso. Seguro que a los aficionados les gustaría que se repitiese muchas veces más.