Tras la victoria en el Nou Estadi 0-2 el Real Zaragoza se coloca décimo primero en la tabla con 37 puntos, a seis de los puestos de playoff. Los de Natxo González estuvieron a la altura y dominaron la posesión del balón durante la mayor parte del encuentro; sin embargo, durante la mayor parte del segundo tiempo fue Cristian Álvarez quien destacó con sus intervenciones. El Nástic de Tarragona presionó sobre todo al final del encuentro para intentar romper la mala racha que ya es costumbre en su campo.

El partido comenzó con la posesión a favor del Real Zaragoza, aunque tampoco de manera muy notable. Durante la primera media hora del encuentro, ambos equipos tuvieron numerosas ocasiones. Los de Tarragona llegaron tres veces claras a la portería del Real Zaragoza en esos minutos, momentos en los que Cristian Álvarez tuvo que demostrar su talento en la portería. Además del portero zaragocista, la defensa central, compuesta por Simone Grippo y Bruno Perone, supo reaccionar también e incluso el último de la pareja en llegar al club blanquillo acudió en la búsqueda del rival muy adelantado en el campo y con mucha intensidad.

Poco antes de cumplir los treinta minutos de la primera parte Álvaro Vázquez, jugador del Nástic, tuvo que ser sustituido en el campo, ya que sufrió una torcedura en el tobillo. Fue Uche, exfutbolista del club maño, quien entró en el terreno de juego para ocupar su lugar. A partir de este momento el Real Zaragoza se vino arriba y se sucedieron numerosas ocasiones a favor de los visitantes. En el minuto 39 comenzaron unos minutos de mucho sufrimiento para el Nástic de Tarragona; ya que Alberto Zapater lanzó una falta peligrosa a favor de los maños que acabó en las manos del portero. Justo después Jorge Pombo envió un balón al punto de penalti que Borja Iglesias no supo culminar pero que acabó en córner. Fue Eguaras quien realizó el centro y Simone Grippo remató consiguiendo su tercer gol en esta temporada. Minuto 41, marcador 0-1 a favor del Real Zaragoza.

La primera parte todavía no había terminado. El colegiado añadió tres minutos de descuento que generaron mucho peligro a los blanquillos. Una jugada de ataque del Nástic de Tarragona acabó con una falta a su favor en el borde del área aunque muy ladeada hacia la izquierda de la portería. Fue Cristian Álvarez quien cometió la infracción y fue sancionado con una tarjeta amarilla muy protestada por parte de sus compañeros, que alegaban que el guardameta estaba dentro del área cuando tocó el balón con la mano.

La segunda parte comenzó con mucha presión por parte de los locales, sin embargo la defensa del Real Zaragoza no se viene abajo y consigue alejar a los tarraconenses de su área. Tras esto el Real Zaragoza se entonó y consiguió mover el balón hasta atravesar la línea del centro del campo. A partir del minuto 50 se sucedieron varias ocasiones de Borja Iglesias, Pombo y Febas, que dispararon  puerta pero no con demasiada fuerza. Fue en el minuto 59 cuando el panda aseguró el marcador con el 0-2. Fue Febas quien tras una carrera con el balón en los pies asistió un balón en profundidad a Borja Igleisas, que llegó justo para levantarlo por encima del portero y entró en la portería del Nástic de Tarragona.

El Real Zaragoza siguió sin venirse abajo y poco después de esta acción Pombo logró llegar al área rival con el balón controlado, pero la defensa consiguió arrebatárselo. En esta jugada los aficionados zaragocistas que acudieron al Nou Estadi no se quedaron callados; pedían mano a favor de los blanquillos, pero el colegiado no lo consideró así. En el minuto 68 Natxo González realizó el primer cambio en la alineación, salió del terreno de juego Guti y en su lugar entró Buff, que el partido anterior había anotado desde una falta. Fue en ese momento cuando el Real Zaragoza comenzó a decaer; las ocasiones cesaron y los maños se centraron en defender, aunque sin mucho éxito, Cristian Álvarez tuvo que hacer de las suyas en repetidas ocasiones y salvó el marcador a cero, que incluso podría haber llegado a reflejar un empate tras estos minutos.

El siguiente cambio se realizó en el minuto 78, cuando Jorge Pombo abandonó el terreno de juego y Vinicius ocupó su lugar; un cambio en la delantera que habría sido más eficaz añadiendo un jugador con más habilidades defensivas, ya que el Real Zaragoza continuó encerrado o en su mitad del campo durante los últimos minutos de juego corriendo peligro en numerosas ocasiones. Natxo González pareció darse cuenta y cambió a Eguaras por Mikel González, que se estrenaba tras la lesión, en el minuto 82. La defensa pareció más eficaz a partir de este cambio, aunque el equipo blanquillo continuaba sin traspasar la línea del centro del campo. Durante los últimos minutos de juego puede decirse que el jugador destacado fue Cristian Álvarez, el guardameta salvó al Real Zaragoza de un resultado no tan favorable.