El Gavà sobrevive y vence en el descuento al Atlético Levante

Era la primera de las finales que le quedan a sendos conjuntos de cara al objetivo de la salvación. Tanto Gavà como Atlético Levante debían ganar si querían coger aire en la parte baja de la clasificación, y finalmente fueron los locales quienes se lo llevaron en un partido gris.

Poco fútbol

Para comenzar, tanto Mena como Granero variaron sus esquemas. El argentino dejó únicamente a Boris en punta, cuando suele ser habitual que el Gavà juegue con dos delanteros, y el filial cambió la defensa de 5 por una línea de 4. Quizás por los cambios, los dos equipos salieron adormecidos al terreno de juego, mostrando una de las primeras partes más insípidas que se recuerdan esta temporada sobre el césped de La Bóbila.

Gracias al esquema con 5 centrocampistas, tanto Niko Kata como Alex Pla se descolgaban para llegar al área rival con peligro. Precisamente fue el mediocentro catalán quién gozó de las dos primeras oportunidades, con dos disparos desde la frontal (en el primero se pidió penalti por mano). Después le llegó el turno a Niko Kata, al filo del descanso, pero su remate también se perdió por encima de la portería de Sotres.

Por parte visitante, las posesiones del filial eran totalmente estériles. De hecho, la única ocasión de la que dispusieron los granotas fue en una jugada de contraataque. Allyson le ganó la partida en el descuento a Mario y su potente chut se fue cerca de la cruceta que defendía Craviotto.

Los puntos se quedan en casa

Como viene siendo costumbre en Gavà, las charlas motivadoras de Óscar Mena al descanso suelen cambiar el rumbo de los partidos. Tal fue el cambio de chip que solo seis minutos después de la reanudación los azulgranas golpearon con fuerza sobre la mesa. Boris sirvió un balón a Niko Kata para que el internacional por Guinea Ecuatorial remachara la jugada con un gran disparo raso.

Pese a la ventaja en el marcador, a nivel futbolístico, el tanto hizo más daño al propio Gavà que a los visitantes. Pese a ello, Niko tuvo el segundo tras un buen centro de Boris, pero esta fue la última oportunidad de los locales hasta el final del partido. A partir de entonces, el Levante fue arrinconando progresivamente a los de Mena. Pese a ello, no hubieron claras ocasiones, hasta que una indecisión en la zaga local terminó con el balón en los pies de Arturo que marcó con un disparo cruzado desde más de 20 metros.

El tanto pareció dejar noqueado a los locales, con aún 15 minutos más el descuento por disputarse. De hecho, solo un minuto después del empate, Manu Viana tuvo el segundo con un mano a mano que desbarató Craviotto. Entre tanto, hubo tiempo para que Hadji (más luces que sombras) y Neeskens (más sombras que luces), debutaran con la zamarra azulgrana.

El partido parecía condenado claramente hacía el empate, hasta que en el último minuto ocurrió el milagro para la parroquia local. Enric Franquesa demostró que debe hacer un jugador de un equipo que se está jugando la vida abajo como el Gavà: luchar hasta el final. De su incansable lucha por banda izquierda consiguió internarse en el área con el balón controlado, y su centro al segundo palo no encontró rematador pero si premio. Sascha cayó en el interior del área y el árbitro señaló el punto de penalti. Pese a que los ayudantes del técnico granota preguntaron rápidamente por dónde chutaba Boris los penaltis, el máximo artillero de la competición no falló y engañó a Sotres para darle los tres puntos al Gavà.

Con esta victoria, los hombres de Mena respiran tras sumar los seis últimos puntos, empatan el gol average con el Atlético Levante y pueden acabar la jornada fuera del descenso a expensas del Espanyol B-Prat. En cambio, el filial se hunde en la tabla y se queda a cinco de los puestos de salvación. 

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