El Valencia y el Leganés se han enfrentado únicamente en una ocasión, a pesar de la longeva historia de ambos clubes. El motivo no es otro que el estreno del club pepinero en Primera División en la presente campaña, ya que, pese a sus 88 años de historia, el Leganés nunca había conseguido acceder a la máxima categoría del fútbol español.
El único enfrentamiento entre los dos clubes se produjo hace poco más de dos meses, cuando los blanquinegros visitaron Butarque para disputar la sexta jornada de La Liga. En ese momento, el equipo che llegaba al encuentro con Voro a la cabeza, repleto de ánimo, solo una semana después de haber conseguido su primera victoria en competición doméstica.
En Butarque, el conjunto de Mestalla consiguió remontar el gol de Szymanowski y llevarse los tres puntos, gracias a los goles de Nani y Mario Suárez. Además, en dicho encuentro, Diego Alves se alzó como el portero que más penas máximas ha detenido en la historia de la competición, tras detener un penalti a Szymanowski.
Sin embargo, la racha de victorias no continuó y parece que el efecto Prandelli ha durado muy poco, con un bagaje de una victoria, dos empates y tres derrotas. Sin embargo, el partido ante el Sevilla podría ser un punto de inflexión para el club blanquinegro, ya que, pese a la derrota, se vio a un equipo más compacto y serio en defensa.
En cuanto al Leganés, sufre, en estos momentos, una plaga de lesiones. Los pepineros vienen de una derrota por 3-0 ante el RCD Espanyol, donde se produjo la lesión de su portero, Serantes. Además, en el partido ante Osasuna –que supuso los primeros tres puntos de los de Garitano en Butarque en Primera División– se produjeron tres bajas importantes: Szymanowski, Diego Rico y el exvalencianista Rober Ibáñez. Además, también se produjo la lesión de Adrián Marín en un entrenamiento, por lo que los pepineros llegan cortos de efectivos al encuentro de Copa.
El conjunto de Prandelli tiene, en esta Copa del Rey, la oportunidad de que la ilusión vuelva a los aficionados. Además, vista la situación actual en La Liga, cada vez se hace más complicado que los blanquinegros consigan el objetivo de alcanzar puestos europeos, por lo que la Copa del Rey –cuyo ganador disputa la Europa League– podría servir para jugar en Europa y salvar los muebles en una temporada que no ha arrancado nada bien para los valencianistas. Además, serviría para continuar con los buenos resultados en un estadio como Butarque, donde el Leganés ha demostrado ser duro de batir en la presente campaña.