Uno de los mejores reclutamientos en el Draft fue lo que hicieron los Denver Broncos en el 2011, ya que en su primera selección adquirieron a Von Miller para apuntalar su defensiva. Años después, se convirtió en una de las mejores de toda la liga e, inclusive, llegaron en un par de ocasiones a la Super Bowl, derrotando en la edición 50 a los Carolina Panthers y, en ese mismo juego, a pesar de que Cam Newton venía como MVP de la liga, el jugador más valioso del partido en el anillo de los Broncos precisamente fue Von Miller.
Además de las estadísticas que posee el defensivo, su presencia y liderazgo en el equipo se nota cuando pisa el terreno de juego, el aporte anímico a sus compañeros y las modificaciones de la ofensiva en turno que tienen que hacer cuando se avecina una carga demuestran que, en siete años en la NFL, Von Miller es uno de los mejores en dicha posición.
En el juego contra los Jets, el linebacker llegó a diez capturas en la temporada, logrando llegar a esta cifra durante cuatro temporadas consecutivas y, desde su llegada a Colorado, sólo en el 2013 no lo consiguió. Curiosamente en el juego del Thursday Night Football contra los Indianapolis Colts, Jacoby Brissett en el tercer cuarto tuvo una captura que fue contabilizada a Bradley Roby, aunque al final del partido el propio Von Miller declaró que iba a apelar la decisión para que le dieran esa captura que fue propiciada por él.
En 102 juegos de temporada regular suma 83.5 sacks, siendo el tercero mejor en este parámetro para Denver; su mejor temporada data del 2012 cuando logró hacer 18.5 capturas en 16 juegos, promediando poco más de una por partido.
A pesar de que la defensiva de los Broncos se ha visto vulnerable en esta campaña, recibiendo más de 40 puntos en juegos consecutivos contra Philadelphia y New England, Von Miller continúa imponiendo marcas.