Los New Orleans Saints hicieron lo necesario para sacar la victoria 21-9 ante los Chicago Bears en el Wild Card Game de la NFL, obteniendo su boleto a la siguiente ronda en donde enfrentarán a los Buccaneers de Tom Brady.
Chicago, que se había metido por la puerta de atrás en el séptimo lugar, exhibió sus carencias a la ofensiva, la cual no pudo carburar en todo la tarde bajo el mando de Mitchell Trubisky, quien podría estar viviendo sus últimos momentos en la institución.
Después de una serie por bando improductiva, la marcha de los Saints por fin comenzó a carburar y la conexión Drew Brees a Michael Thomas volvió a reencontrarse tras el envío de 11 yardas para abrir el marcador.
A raíz de entonces las defensivas comenzaron a dominar y provocaron que el partido tuviera constantes patadas de despeje. Fue una intercepción a Taysom Hill que provocó que Chicago arrancara con una buena posición, pero después de seis jugadas se conformaron con el field goal de Cairo Santos.
Chicago tuvo la primera ofensiva de la segunda mitad en donde movió en un par de oportunidades las cadenas, pero terminó entregando el balón justo a medio campo.
New Orleans inclinó la balanza
A la postre, el equipo de Luisiana gestó un sólido ataque de más de siete minutos que finalizó con el pase de seis yardas de Brees a Latavius Murray.
A finales del tercer cuarto, el conjunto de casa recuperó el ovoide y volvió a montar una buena ofensa que consumió más de ocho minutos para que Alvin Kamara penetrara las diagonales para el 21-3.
Instantes después, New Orleans tuvo varias oportunidades de volver a hacer un touchdown, pero en cuarto down Drew Brees no llegó a las diagonales al quedarse a solo unas pulgadas.
A pesar iniciar de la yarda uno, Chicago hizo más decorosa la pizarra en la última jugada de la noche con el envío de Trubisky a Jimmy Graham de 19 yardas.
Ahora New Orleans se medirá en la ronda divisional a los Tampa Bay Buccaneers el próximo fin de semana.