Mientras que de Austin, Maverick salió pensando en la futura victoria, la cual no parecía estar lejos, en Jerez el discurso fue totalmente diferente para el de Roses. Y es que este fin de semana ha podido comprobar que los problemas que vienen castigando a las Yamaha desde hace meses no se han solucionado como creían en Estados Unidos y en el trazado gaditano brotaron de nuevo.

Viñales acabó la carrera en la séptima posición tras un fin de semana con muchos problemas. Sin embargo, como en el caso de su compañero de equipo, la posición en la que acabó el catalán es engañosa ya que se produjo porque la triple caída de Pedrosa, Lorenzo y Dovizioso le hizo ganar tres posiciones. Un resultado que le aleja en el campeonato tanto en cuanto a puntos como en sensaciones. 

"Es decepcionante viniendo de Austin motivado y con ganas" dijo Viñales. Estamos trabajando e intentando sacarlo. Nuestra posición es pelear por podios y en algunos sitios por la victoria. El nivel que podemos dar no es el que estamos mostrando ahora mismo. Sé perfectamente que si las cosas funcionan podemos luchar por las victorias, pero ahora estamos detrás. Los rivales nos han superado por bastante. Así que tenemos que seguir trabajando", declaró el '25'.

Al finalizar la carrera, su compañero de equipo, Valentino Rossi, fue muy crítico con la gestión de Yamaha, señalando la lentitud para la toma de decisiones desde Japón. Algo más cauto fue Viñales en sus palabras, si bien afirmó que lleva demasiado tiempo buscando solución a un mismo problema.

Foto: Maria Viñas - VAVEL
Foto: Maria Viñas - VAVEL

"Llevo 10 meses diciendo lo mismo, que no tengo agarre", insistió "Trato de hacer de todo y al final el problema es el mismo, la moto no acelera. Eso solo significa una cosa, la electrónica no está trabajando, seguro. En un fin de semana tengo que cambiar el estilo de pilotaje dos o tres veces para tratar de que la moto funcione. Me siento un poco confuso porque al final sé que no estamos rindiendo al 100%".

"Es difícil decir si está dando el 100%, eso solo lo sabe la fábrica", respondió Viñales al ser preguntado si Yamaha está dándolo todo. "No debería haber frente común [con Rossi]. El problema es claro y deberían solucionarlo. Pilotando detrás de Morbidelli o Bautista se ve donde están los fallos de la moto. Yo transmito eso. Por parte de mi equipo lo están probando todo. Han puesto la moto de 1000 maneras este fin de semana tratando de buscar el setup".

Lo peor en el box del '25' es la confusión que se está generando. El piloto volvió a repetir en que el rendimiento de la M1 depende mucho de la pista y que no sabe qué esperar de un circuito a otro. 

"La moto cambia mucho de una pista a otra. Igual vamos a Le Mans y parece que se ha resulto, pero los problemas existen desde hace 10 meses. En la pretemporada ya se vieron. Yo siempre insistí bastante. Ahora es lo que hay y con eso hay que sacar el 100%, como siempre he hecho", zanjó.