Pirelli ha confirmado los compuestos que llevará al GP de Hungría que se celebrará los próximos 27, 28 y 29 Julio. Un Gran Premio que siempre nos depara sorpresas y en el que los neumáticos jugarán un papel fundamental  en el transcurrir de la carrera.

La compañía con sede en Milán ha anunciado que llevará los compuestos medios, blandos y ultrablandos, dejando de lado los superblandos que tan bien funcionaron sorprendentemente en el pasado GP de Mónaco. Por el contrario será la misma alineación de neumáticos que llevará Alemania, sin olvidar que en China también llevaron estos tres compuestos.

Esta elección difiere ligeramente a la elegida por Pirelli en 2017, ya que el pasado año decidieron llevar el medio, el blando y el superblando. Los pilotos tendrán en su mano la elección del número de juegos que llevarán cada uno, aumentando así la posibilidad de estrategias diferentes entre pilotos y escuderías.

El pasado GP de Mónaco dejó varias sorpresas en el funcionamiento de los neumáticos, un hiperblando con el que se batió el récord del circuito pero que sufría de una alta degradación, y un superblando que era el compuesto más duro y que a la postre se reveló como el neumático más fiable para la carrera. A pesar de esto, los equipos solo realizaron una parada y los pilotos llegaron a afirmar que fue la carrera más aburrida de los últimos años en un Gran Premio que debería de destacar sobre los demás, aunque no se le puede achacar toda la culpa al fabricante italiano.

Los neumáticos han estado en el punto de mira durante toda la temporada. De hecho, ante las críticas recibidas recientemente, Pirelli ha llegado a amenazar con dejar el Gran Circo y dejar huérfana a la Fórmula 1. Pirelli es el único suministrador de neumáticos en la categoría reina desde el año 2011.