Hay carreras que siempre serán recordadas durante varios años, y el Gran Premio de Austria 2019 disputada en el Red Bull Ring será una de esas que perdurará en la memoria de los aficionados.
Ducati llegaba a la carrera obligados a conseguir la victoria, y acabar con la racha triunfal de un Márquez,que por momentos comenzaba a verse imbatible ante sus rivales. Con este objetivo y siendo un circuito muy favorable para el equipo Ducati,se daban todos los ingredientes para ver una gran carrera.
La carrera no ha defraudado desde el primer momento, donde en una apretada salida Dovizioso a sabiendas de que no había que dejar escaparse a Marc, como en anteriores carreras,ha decidido coger su rueda e intentar pasarle cuanto antes. En la curva 3,el italiano ha ido a por todas y ha visto como su rival se iba largo,y apunto ha estado de costarle la caída a los dos, Quartararo muy listo que venía detrás de ellos lo ha aprovechado para colocarse primero e intentar escaparse. En ese momento Miller y Rins que habían realizado una gran salida también aprovechaban el error de Marc y Dovi para colocarse por delante.
A partir de ese momento comenzaba la remontada de Dovi y Marc para luchar por la victoria, muy pronto los dos recuperarían las posiciones cabeceras para colocarse detrás de Quartararo en la punta de la cabeza. Dovizioso aprovechando la mayor velocidad punta de la Ducati,adelantaba a su rival en la recta de meta, en ese momento Marc ha visto que no podía dejar ni un metro a su gran rival en el día de hoy,y al instante se lanzaba a adelantar al francés para evitar que el de Ducati se marchara en cabeza.
En ese momento y con 21 vueltas por delante,la carrera se convertía en cosa de dos, entre Marc Márquéz y Andrea Dovizioso. Poco a poco el español y el italiano,aprovechando su mayor ritmo de carrera sobre sus rivales iban abriendo un hueco que ha determinado que hubieran dos carreras diferentes al final de carrera, una de lucha por la victoria y otra de lucha por el podio.
Y los duelos Marc-Dovi nunca defraudan,y esta vez no podía ser menos, en esta ocasión en territorio Ducati, Marc tenía que luchar por acabar con la hegemonía del equipo italiano en este circuito y añadir a su palmarés el único escollo que se le resiste. Con esa intención el líder del mundial ha tratado de imponer el ritmo que ha demostrado durante el fin de semana,para escaparse pero hoy Dovizioso ha vuelto a demostrar ser el mejor Andrea que recordamos. El segundo del campeonato adelantaba a falta de 9 vueltas a su rival,y para evitar sus duelos con Márquez de los últimos tiempos ha intentado marcar un gran ritmo para dejar al español, pero hoy Marc estaba concienciado de que tenía que ser su día y no le ha dejado ningún hueco a su rival.
A falta de 3 vueltas y para deleite de los aficionados comenzaba el festival de adelantamientos entre los dos mejores pilotos del momento. Unas tres últimas vueltas para el recuerdo de esas que se guardan en la memoria. Una continua batalla entre dos pilotos que hoy no les valía otra cosa que no fuera la victoria, porque era más que una victoria, era una batalla psicológica. A diferencia de otras ocasiones donde Marc llegaba detrás de su rival a la última vuelta para intentar batirle, este año el ilerdense ha tratado de llegar en solitario y cuando ya pensaba que al fin lograría la victoria en el trazado austriaco,en la última curva Andrea Dovizioso ha realizado un adelantamiento estratosférico, de los mejores que se recuerdan para ganar a su rival y demostrarle que todavía tiene rival y que la batalla no ha terminado.
El italiano se lleva una victoria que seguro que le dará mucha confianza y le subirá la moral para afrontar las próximas carreras. No podemos terminar sin hacer mención especial a la carrera de Quartararo,que ha conseguido un gran podio y de un gran Valentino Rossi, que justo en la semana en la que ha zanjado las dudas sobre su continuidad ha realizado una gran carrera aguantando a sus perseguidores y consiguiendo una gran cuarta posición.
El Gran Premio de Austria 2019 prometía fuertes emociones y no ha defraudado a nadie, una carrera que para el bien de los aficionados deja el mundial vivo y visto lo visto todavía quedan muchas emociones fuertes.