El neerlandés Max Verstappen es desde hace horas bicampeón del mundo de Fórmula 1 al dominar desde el inicio una carrera en Suzuka que se vio recortada debido a la lluvia. El neerlandés apenas tuvo la amenaza de Leclerc en los primeros metros, aunque impuso su ritmo igualando a Alonso en victorias y proclamándose, gracias en parte a una sanción de Leclerc, campeón del mundo.

La carrera pudo haber traído malos presagios, en primer lugar con la posibilidad de repetir el lamentable episodio vivido en Spa el pasado año, y después, al pasar Pierre Gasly muy cerca de una grúa cuando la carrera estaba neutralizada bajo Safety Car, pudiéndose haber repetido el fatal desenlace que vivió Jules Bianchi el 2014.

Tras dos años sin visitar el circuito y tras la vibrante qualy vivida el sábado, la carrera se vivió con la pista tal y como se la encontraron los pilotos en los libres del viernes, montando los intermedios de la gama de Pirelli.

No fue buena la arrancada de Max, y Leclerc se puso en paralelo o incluso por delante por algún momento, aunque el neerlandés se lanzó en el exterior de la primera curva y mantuvo el primer lugar. Pérez había adelantado a Carlos para colocarse tercero pero debió abandonar tras accidentarse en la curva 12 provocando un  safety car que se convertiría luego en bandera roja.

Ocon no arrancó excesivamente bien manteniendo su posición inicial, aunque ascendió al cuarto lugar por el accidente de Carlos. Hamilton se encontraba quinto, atacado por un Fernando que lo intentó en la curva once. Russell por entonces marchaba séptimo mientras Ricciardo, Tsunoda y Schumacher marchaban justo atrás.

En el período de bandera roja se observó que Pierre Gasly se encontraba extremadamente cabreado sabiendo luego el porqué, el motivo no era otro que se encontró un vehículo de extracción en la pista cuando no había ondeado aún la bandera roja, recordando al precedente sucedido el año 2014 cuando Jules Bianchi se accidentó mientras una grúa rescataba el monoplaza de Adrian Sutil. Varios minutos después, pese a un intento de dirección de carrera de relanzar la carrera, decidió abortar.

<strong><a  data-cke-saved-href='https://www.vavel.com/es/motor/2022/03/18/formula1/1105545-ferrari-ilusiona-en-los-libres-que-abren-la-nueva-era.html' href='https://www.vavel.com/es/motor/2022/03/18/formula1/1105545-ferrari-ilusiona-en-los-libres-que-abren-la-nueva-era.html'>Pierre Gasly</a></strong> pasando a centímetros de una grúa. Fuente: Onboard F1TV
Pierre Gasly pasando a centímetros de una grúa. Fuente: Onboard F1TV

Tras más de una hora sin actividad en la pista, tras otras tres vueltas detrás del coche de seguridad, se relanzó la carrera. Verstappen tomó el mando de la misma, con Charles a la estela suya en una nube de spray de agua. Las posiciones se mantenían por detrás mientras Vettel y Latifi pasaban por boxes para montar gomas intermedias.

Ya en la octava vuelta, viendo los cronos por vuelta de Vettel y Latifi, casi toda la parrilla montaba los intermedios, a excepción de Fernando Alonso y Mick Schumacher. El alemán estaba al fondo de la parrilla y con una estrategia arriesgada se colocaba sexto por el momento.

Con prácticamente toda la parrilla con los intermedios, Verstappen lideraba el gran premio mientras Leclerc intentaba seguir su ritmo y Pérez se situaba tercero. Justo detrás, Ocon, Hamilton, Vettel y Alonso, mientras Latifi estaba octavo y, al igual que Vettel, jugaba con la estrategia intentando remontar algunos puestos.

En algunas pocas vueltas Verstappen abrió un importante hueco de cinco segundos con Leclerc a la par que Pérez hacía lo mismo con los pilotos de cabeza. Por detrás Ocon tenía ni más ni menos que a Hamilton pegado literalmente a su alerón trasero y Vettel estaba en una situación parecida con Alonso.

Conforme pasaban las vueltas al trazado de Suzuka la sangría de Leclerc con Verstappen era insostenible, cayendo a once segundos viendo como Pérez se acercaba a menos de cinco segundos. Los pilotos iniciaban a sufrir con la goma intermedia y su degradación y se planteaban parar, pero quedaban menos de veinte minutos para acabar la carrera, ya en ese punto descontando tiempo en vez de vueltas como manda el reglamento.

Quienes decidían parar serían algunos pilotos de zona baja del grupo pero la parte alta no parecía una buena opción cuando faltaban menos de diez minutos de Gran Premio. Verstappen seguía mandando, con ventaja más que considerable de 15 segundos con Leclerc y Pérez pegado al alerón trasero del monegasco. Las posiciones se establecían, a excepción del octavo lugar, que pasaba de Latifi a Russell.

Ocon completaba una gran carrera por su parte, cuarto, tras aguantar a Hamilton varias vueltas. Por detrás, Alonso adelantó a varios pilotos y llegó a la altura de Sebastian Vettel en la última vuelta, quedándose a escasas milésimas, siendo sexto el alemán finalmente con Alonso, Russell, Latifi y Norris acabando el top 10.