Lunes de fútbol en El Sardinero (21:00 h). El Racing-Leganés cerraba una jornada 27 en la Liga SmartBank cuyos resultados favorecían los intereses de los cántabros. Sin embargo, el punto conseguido por la "Ponfe" hacía comenzar a los verdiblancos desde posiciones de descenso. Contra todo pronóstico, ganas de lunes entre la parroquia racinguista. Entre la pasión y la enfermedad.

Roko Baturina titular

La alineación de JAL presentaba varios cambios -esperados- respecto a los futbolistas que empataron la semana anterior ante la propia Ponferradina. Debut como titulares de los fichajes invernales con Roko en punta por el lesionado Matheus, mientras que Sangalli ocupaba la banda de Íñigo Vicente -que fue a la media punta por la sanción de Jorge Pombo-. En la sala de máquinas, Aritz Aldasoro volvía junto a Íñigo tras cumplir ciclo, sin sorpresas ya que Juergen Elitim hacía lo propio. Por último, banda izquierda para Saúl García tras recuperar su tobillo con el otro García (Mario) esperando su oportunidad en el banquillo.

La falta de hombres de toque claves como Pombo y Juergen hacía presagiar un encuentro más tosco de lo acostumbrado con la nueva propuesta de JAL. De hecho, eran los visitantes los que arrancaban el encuentro con la batuta del mismo ante un Racing más replegado. Sin embargo, todo cambió rápidamente: Un par de robos en el MC propiciaron sendos ataques vertiginosos de los cántabros que les sirvieron para soltarse los nervios y atenazar a un Leganés que trató de rebajar las pulsaciones al encuentro. Nada más lejos, una presión incesante comandada por un hiperactivo Íñigo Vicente impedía a los pepineros salir de su propio campo, mientras los verdiblancos volcaban poco a poco el partido hacia el área defendida por Asier Riesgo.

Un par de imprecisiones con el esférico por parte de los cántabros unidas a la calidad de hombres como Dani Raba y José Arnaiz mantuvieron abiertas las opciones de ambos equipos. No obstante, los pupilos de JAL transmitían una intensidad y seguridad en la propuesta no vistas hasta la fecha y la grada era optimista. Cuando más bonito estaba el partido, un corner botado por Vicente fue peinado gracias a una buena anticipación de Germán para dejar completamente sólo a Roko. El joven atacante croata batió con solvencia a Asier Riesgo  para el delirio de la Gradona, que rugía como antaño tras la regularización de sus elementos característicos de animación. 1-0 min. 27 y por fin un nuevo gol a balón parado.

El gol no pudo sentar mejor a los verdiblancos: Con la ventaja momentánea en el marcador y la posibilidad de defender con balón, el Racing creció de la mano de unos omnipresentes Aritz Aldasoro e Íñigo Vicente. Sus movimientos para ofrecerse, dar opciones y combinar fueron una constante. La presencia de Marco Sangalli y unos laterales ofensivos como son Dani Fernández y Saúl resultaron en una propuesta vistosa donde el Racing se gustó en uno de sus mejores tramos en los Campos de Sport de toda la temporada. El propio Roko pudo hacer el 2-0 en una gran incursión de Dani a un nuevo pase del 10. Por contra, Miquel Parera salvó antes del descanso a los suyos desbaratando un mano a mano donde se hizo enorme ante Juan Muñoz. Al descanso con todo por ver y decidir.

Roko Baturina ha caído con buen pie en Santander. Imagen: RRC
Roko Baturina ha caído con buen pie en Santander. Imagen: RRC

 

Gasolina hasta el 60'

La segunda parte arrancó con Fausto Tienza acompañando a Aritz ante la baja por una reacción alérgica del capitán Íñigo Sainz-Maza, que parece fuera de peligro. El corte más defensivo de la permuta no modificó sin embargo la propuesta local, y fruto de ello llegó el segundo gol de la tarde en un gran robo de Saúl, que abrió para que Íñigo Vicente pusiera un balón telegrafiado -absolutamente impecable- a la entrada de Jordi Mboula, que solo tuvo que rematar ante un Asier Riesgo ya batido. 2-0 min. 47 y el aficionado racinguista comenzaba a respirar ante lo acontecido sobre el césped. 

A diferencia de otros partidos anteriores -no sólo del Racing, sino de la mayoría de equipos de la categoría- los vencedores momentáneos no se encerraron y siguieron presionando ante un Leganés que no se terminaba de explicar cómo un equipo en descenso le estaba exigiendo tanto. Imanol Idiakez dio entrada a Neyou, Narvaez y Karrikaburu que agitaron el encuentro (min. 62). Fruto de ello, un buen pase de Miramón encontró a José Arnaiz que fusiló con rapidez a un Miquel algo descolocado. 2-1 min. 68 y el Racing que veía como, sin sufrir mucho, podía perder todo lo conseguido hasta ese momento.

Inferioridad numérica

Cuando peor pintaban las cosas para los verdiblancos, Neyou era expulsado con roja directa por una agresión sin balón a Íñigo Vicente (min. 72). El futbolista madrileño se pasó de revoluciones ante la atenta mirada del colegiado González Esteban, a escasos metros. La expulsión privó a los madrileños de poder apretar en busca del empate y de hecho los locales estuvieron muy cerca de conseguir el definitivo 3-1 en las botas de Mboula, que no tuvo fortuna. Yeray y Sekou Gassama aportaron la frescura necesaria en ataque para no sufrir en exceso si bien el Leganés pudo haber conseguido el empate con un disparo seco a bocajarro de José Arnaiz que atajó con solvencia Parera. Sufrimiento final pero los 3 puntos se quedaron en Santander para delirio de los aficionados que veían cómo por fin se pone algo de tierra de por medio respecto al descenso. El resultado permite además reenganchar a la lucha por la salvación a equipos como Andorra, Villareal B o Zaragoza, que no terminan de carburar.

Por fin se permitieron elementos de animación y La Gradona volvió a lucir de gala. Imagen: RRC
Por fin se permitieron elementos de animación y La Gradona volvió a lucir de gala. Imagen: RRC

 

Nombres clave

Rubén Alves: Nuevo partido impecable del mariscal defensivo. Sensación de seguridad constante, todo lo hace bien. Y no está al 100% debido a una lesión que arrastra en el tobillo izquierdo. Urge blindarlo.

Aritz Aldasoro: Pecó de impreciso en un par de ocasiones sin mayor dificultad, que él mismo se encargó de resolver. No para de ofrecerse estando más o menos fino, pero es que ayer además generó grandes acciones en ataque. Recordó a una versión combinada del mejor Juergen con el mejor Íñigo. Va a más.

Íñigo Vicente: Es un jugador diferente. Más clase que un instituto, pero también garra y pelea. Está de dulce. Todo el juego ofensivo pasa por él. Hasta provocó una expulsión. Prohibido encorsetarle en la banda.

Roko Baturina: Sin hacer grandes florituras ha dado un salto de calidad al ataque. En apenas 100 minutos gol y espacios. También las gana, cuerpea y descarga. Ha caído de pie.

Germán: La única sombra en defensa. Parece sin confianza para sacar el balón. Tuvo luz, por arriba lo gana todo y anticipó con acierto. Medio 1-0 es suyo. Puede dar más y él lo sabe. A base de partidos ha de encontrar su mejor versión.