La Deportiva, acuciada por la necesidad de puntos, continúa sin cambiar esa dinámica negativa fuera de casa, aunque bien es cierto que el conjunto berciano se mostro muy sólido durante todo el partido, Osasuna apenas generó peligro, pero los blanquiazules se vuelven a Ponferrada con un botín escaso de El Sadar. La falta de gol volvió a penalizar a los bercianos, como es la tónica habitual esta temporada ya que ni es capaz de aprovechar los penaltis que le señalan.
La dupla formada por Nistal y Rubén Vega varió el esquema de inicio respecto a la semana pasada ante el Zaragoza y apostó por un 4-4-2 clásico. Las dos únicas modificaciones respecto a la anterior jornada fueron la entrada de Basha en lugar de Jonathan Ruiz como acompañante de Andy en el doble pivote y la del delantero liberiano William Jebor en lugar de Caiado, pasando Sergio Aguza a banda izquierda.
Pocas ocasiones durante la primera parte
Comenzó el encuentro avisando el equipo blanquiazul con un disparo de Aguza que salió muy desviado de la meta de Nauzet, sin embargo el Osasuna no tardó en responder y fue a balón parado, a través de un córner donde llegaría el remate del central David García se fue cerca de la portería de Santamaria. Los blanquiazules aguantaron el empuje inicial del cuadro rojillo que sólo inquietaba en acciones de estrategia.
Poco a poco se fue adueñando del partido la Ponferradina y fruto de ello llegaría una de las ocasiones más claras del encuentro pasados los primeros veinte minutos, una arrancada sensacional por parte izquierda de Camille, que dio una asistencia maravillosa a Berrocal que no supo definir en el mano a mano ante el guardameta Nauzet y el delantero cordobés malograría una grandísima ocasión para la Deportiva.
No tardó en responder el Osasuna a esta ocasión, con una internada de Pucko por banda izquierda que desbordó a Adán pero su centro raso se paseo por todo el área sin encontrar rematador por fortuna para la Ponferradina. Esta última acción sería la más peligrosa por ambos conjuntos hasta el final de los primeros 45 minutos aunque los bercianos lo intentaron pero sin llevar peligro a la portería del guardameta local Nauzet.
El Osasuna se reactiva tras el descanso pero la Deportiva responde
El técnico local Martin Monreal realizó movió ficha tras el paso por vestuarios y realizo la primera sustitución del encuentro con la entrada de Alex Berenguer en lugar de Miguel De las Cuevas. Esta sustitución dio otro aire al cuadro rojillo y fruto de ello a los tres minutos de la reanudación gozaría de una de sus mejores oportunidades del encuentro con un disparo potente de Oier que salió cerca de la portería de Santamaria.
Llegaban más cambios por ambos equipos, el Osasuna introducía a Olavide por Pucko y respondía Rubén Vega por partida doble dando entrada en el campo a Caiado en lugar de Aguza y a Djordjevic por un desaparecido Jebor. La entrada del ariete montenegrino aportó más movilidad al ataque blanquiazul, que no tardó en llevar el susto a la parroquia local.
A los dos minutos de ingresar en el terrero de juego, Djordjevic provocó el fallo del central rojillo de David García que perdió la pelota ante el delantero y por consiguiente le derribó dentro del área y el colegiado no dudó en señalar la pena máxima. Acorán asumió la responsabilidad de lanzar el penalti, pero el extremo tinerfeño telegrafió demasiado su lanzamiento y el guardameta local Nauzet adivinaba la intención y realizaba una gran intervención. La Deportiva echaba por tierra la mejor ocasión del partido.
Nauzet detenía la pena máxima lanzada por Acorán evitando que se rompiera la igualdad en el marcadorPoco después, la Ponferradina realizó su última sustitución del encuentro, Jonathan Ruiz tuvo que sustituir a Andy que abandonó el terreno de juego con problemas físicos. Osasuna reaccionó intentando embotellar a la escuadra berciana a base de acciones a balón parado, pero no logró inquietar de verdad la portería defendida por el ex jugador rojillo Roberto Santamaria. Lo seguía intentando la Ponferradina pero no encontraba resquicio en la defensa local, pero sería otra vez una internada por banda izquierda de Luka Djordjevic que sacó un centro raso, que despejaba a duras penas la zaga rojilla y Basha llegando desde segunda línea probó fortuna con un disparo que se fue a córner.
En los últimos minutos del partido, ambas escuadras parecieron dar por bueno el resultado, ya que ninguno de los dos equipos buscó el tanto de la victoria con demasiado ahínco y el partido finalizó con reparto de puntos sin goles en El Sadar. Este punto permite a Osasuna ser cuarto clasificado con 57 puntos mientras que la Ponferradina llega a los 40 puntos pero no evita que los blanquiazules sigan una semana más en puestos de descenso ya que no aprovechó la derrota del Almería en su feudo ante el Nástic.
Se le acaba el tiempo a la Ponferradina que afrontará su primera final de las últimas cinco el próximo domingo a las 17:00 de la tarde en El Toralin ante el Lugo, donde al equipo berciano no le queda otra que ganar si quiere lograr la permanencia una temporada más en Liga Adelante.