En esta noche del jueves en Texas, más precisamente en el AT&T Center, San Antonio Spurs recibió a Houston Rockets con la misión clara de descontar para acercarse a la segunda posición del Oeste.

Con el argentino Emanuel Ginóbili en la banca, los Spurs tenían como armas fuertes la buena temporada de los internos LaMarcus Aldridge y el español Pau Gasol, aunque también no había que quitarle mérito a Dejounte Murray, Bryn Forbes, Davis Bertans y los viejitos Danny Green, Patty Mills y Tony Parker.

El objetivo era complicado, más aún sabiendo que del otro lado se encontraba James Harden, quien sabe lo que es hacerle partido a los Spurs y encima venís de conseguir el récord de 60 puntos y un triple-doble. Sumado a eso, Eric Gordon, Chris PaulClint Capela, Ryan Anderson y compañía hacia más difícil la meta.

Finalmente la victoria fue de los visitantes, quienes se impusieron 102 a 91, con lo cual llegaron a su tercera victoria al hilo y se mantienen expectante y persecutas de los Golden State Warriors, actuales líderes del Oeste. En este instante, están con un récord 37-13

Por otra parte, los Spurs no lograron seguir de racha y continúan en el mismo camino de la irregularidad, donde encuentran juegos de buen nivel basquetbolísticos y al otro encuentro, se presentan con una mala imagen en los rubros defensivo y ofensivo. De todas maneras, los Spurs se mantienen terceros con una marca 34-20.

Houston tomó por sorpresa a San Antonio y gracias a un gran primer cuarto, donde sacaron trece de ventaja (27-14) y una posterior adjudicación del segundo lapso por un marcador más parejo (27-24), con lo cual se fueron al descanso ganando 54 a 38.

Para el tercer período, San Antonio recobró la memoria y se puso a jugar un buen encuentro de básquet, donde pese a que Houston le ofreció lucha, se impuso 32 a 28, con lo cual llegaron al parcial final abajo 82 a 70. En el segmento final, ambas escuadras llegaron cansadas y erráticas por lo cual el score fue muy bajo pero favorable para los locales, quienes ganaron 21-20 este tramo, quedándose con las manos vacías y sufriendo su quinta caída en su casa.

El papel principal de la noche fue de James Harden, quien nuevamente se puso el equipo al hombro y acabó con 28 puntos y 11 asistencias. El veterano Gerald Green aportó 15 desde la banca, Clint Capela otro doble-doble con 14 tantos y 13 rebotes, y Ryan Anderson cerró con 13 unidades entre los mejores acompañantes del Barba.

Para San Antonio, hubo un buen juego de Danny Green, hermano de Gerald, quien finalizó con 22 puntos, seis rebotes y tres robos. Fue escoltado por LaMarcus Aldridge, con 16 unidades y ocho tableros, y Bryn Forbes con 11 tantos.

El bahiense Emanuel Ginóbili no tuvo una gran noche y apenas colaboró con cinco puntos (1/5 T2 y 1/3 T3), tres asistencias, tres pérdidas y cuatro faltas personales en 20 minutos.

Los Rockets tendrán un duro escollo este sábado, donde tendrán que visitar a Cleveland Cavaliers en el Quicken Loans Arena.

Los Spurs, por su parte, volverán a presentarse en su cancha este 3 de febrero cuando reciban a Utah Jazz.