"Cada temporada que se avecina es un borrón y cuenta nueva", es una frase que suena a un cliché de los directores técnicos, pero que en realidad guarda una diversidad de conceptos dignos de mencionar: paciencia, trabajo y desarrollo del jugador. Esto no suele ser el caso de las fichas foráneas que deben adaptarse, rápidamente, a los objetivos del plantel y a la idea de juego del DT. De lo contrario su corte será inminente.
Si bien es cierto, Anthony Smith es un jugador con puntos en la mano, la última postemporada del norteamericano no fue satisfactoria ya que en los playoffs Estudiantes lo necesitó y mucho pero se vio a un Smith apagado y con poca contundencia. Poco le importó este antecedente al ex jugador verde porque, en este Super 20, encontró en Regatas Corrientes un aire fresco, su paraíso basquetbolístico (por los menos momentáneamente) para lograr un rendimiento constante en los primeros juegos de este incipiente Super 20.
En el último partido, justamente contra su ex equipo, Smith anotó 20 puntos y fue gigante en su rendimiento durante los tres minutos finales del último cuarto. Sus dos triples, la especialidad de la casa para el moreno, fueron golpes secos y penetrantes para las altas defensas del conjunto verde que salió a flote después con el explosivo y hábil base, Leandro Vildoza.
El galardón de la semana es para Smith porque es un jugador que le viene como anillo al dedo a Lucas Victoriano y ha logrado un entendimiento importante con Paolo Quinteros. En cuanto al aspecto basquetbolístico, el americano tiene un buen lanzamiento desde el perímetro y una capacidad considerable a la hora de realizar la penetración hacia el cesto contrario.
El rol que tendrá en el equipo de Victoriano surtirá efecto. Será una de las cabezas principales de esta nueva edición de Regatas Corrientes 2018/2019.