Joel Embiid seguirá de baja por lo menos hasta el Game 3 contra Miami Heat. El jugador nacido en Camerún suma ya más de medio mes lesionado, tras el golpe que sufrió el pasado 28 de marzo con su compañero Markelle Fultz. El encontronazo provocó que Embiid sufriera una fractura en el hueso orbital y una conmoción cerebral. Este infortunio le obligó a pasar por el quirófano y ha estado sin jugar desde entonces.

Unos Sixers que, sin Embiid, convencen

Muchos esperaban que con la lesión de Embiid, uno de sus mejores jugadores a día de hoy, los 76ers bajasen el increíble nivel que estaban demostrando. Pero ocurrió justo lo contrario. La franquicia tiene un récord de 9-0 desde que se lesionara Joel, es decir, que todavía no ha perdido. A ello se le suma el impresionante Game 1 que realizaron hace dos días: victoria 130-103 ante los Heat; Ben Simmons 17 puntos, 14 asistencias y nueve rebotes; JJ Redick 28 puntos; Marco Belinelli 25 puntos; Ersan Ilyasova 17 puntos y 14 rebotes…

En referencia hacia esto Brett Brown ha aclarado que el triunfo dominante de su equipo no tiene nada que ver con la decisión de no sacar a Embiid, sino que “se trata de lo que es mejor para la salud de Joel”. También dijo que el plan del regreso empieza por “participar en el trabajo de cancha con miembros del cuerpo técnico o jugadores que no están en la rotación regular entre el Game 2 y el Game 3”.

“Si fuera por mí, jugaría. Pero no puedo regresar si no tengo la aprobación de los médicos”, dijo Embiid.

El propio Embiid hizo unas declaraciones en la previa del pasado partido donde decía que “todo ha ido bien. He podido hacer todo y me siento genial. Tenemos grandes oportunidades de aparecer en el tercer partido. Veremos como me siento en los próximos días”. También confirmó que usará la máscara protectora cuando le toque volver a la cancha.