La agencia libre dejó a los aficionados de los Thunder un tanto fríos tras la salida de sus jugadores capitales, Westbrook y Paul George. Pese a que era necesario un cambio de aires para la franquicia, la forma en la que sucedieron los acontecimientos, quizás sobrepasó a los seguidores más conservadores. Las llegadas de Chris Paul, Shai Gilgeous-Alexander y Gallinari se antojaban insuficientes para un equipo que la pasada campaña era considerado como hipotético duro rival en playoffs. La realidad a día de hoy, es bien diferente, están mejorando los números de la pasada campaña y semana tras semana, dejan claro que nadie va a querer tenerlos en frente en una serie de playoffs.

Oklahoma acabó el pasado curso con un registro de 49 victorias; esta temporada, a falta de jugarse el tramo final, los tejanos acumulan 40 victorias. La última, la lograron ante un contender como es Boston Celtics. Una victoria de prestigio que sella el buen trabajo que viene realizando el cuadro Thunder las últimas semanas. Acumulan 3 victorias de manera consecutiva, y en los últimos 10 partidos, sólo Clippers y Bucks han podido sobrepasar a los de Billy Donovan. La racha positiva de Oklahoma no es casualidad, pues el proyecto que comenzó en verano dejando de lado a las grandes estrellas y centrándose en una estrategia grupal está dando sus frutos.

Ningún jugador promedia más de 20 puntos por noche, pero hay un total de cinco jugadores que aportan más de 10 puntos de media por noche. Oklahoma ha centrado su juego en el equilibrio, son el 9º equipo que mejor defiende de la liga, a su vez, poseen un ratio ofensivo de 111 puntos (14º equipo de la NBA). Pese a ser un equipo que no suele promediar muchos puntos por actuación, los Thunder pueden presumir de ser uno de los equipo que más acierto poseen de cara a canasta, teniendo como gran abanderado a Steven Adams.

Otro dato a tener muy en cuenta para definir el éxito de Thunder es su eficacia en los minutos finales, con un marcador ajustado. Llegando con poca ventaja a los minutos finales (es decir, a los minutos clutch del juego), Thunder tiene un balance de 29 victorias y 13 derrotas, con un más menos anotador de 113 puntos, siendo el mejor equipo de la NBA en este apartado, doblando a su siguiente perseguidor (Houston Rockets, 57). Unos datos que ponen en pie la realidad de un equipo que pese a no ser una máquina anotadora, en los minutos finales siempre muestra su mejor nivel.

La veteranía de Chris Paul, Gallinari y Steven Adams, se ha visto combinada a la perfección con la juventud de Gilgeous-Alexander y Schroeder en un proyecto que ha sabido anteponerse a las adversidades y mira al futuro con buenos ojos, pues en medio de un proceso de reconstrucción, donde traspasaron a sus estrellas se han encontrado con un poderoso núcleo capaz de competir y ganar.

A este buen momento de forma que vive la franquicia de Oklahoma, hay que sumar lo que se viene, pues si desde las oficinas de Thunder son capaces de gestionar la plantilla de cara al futuro, pueden plantarse con un gran equipo, pues no debemos olvidar, que los tejanos poseen 15 elecciones de cara a los próximos draft, fruto de los traspasos de George, Westbrook y Grant. Un presente apasionante y un futuro más que prometedor espera a un franquicia que viene de vivir una de sus mejores épocas en cuanto a talento individual, pero que no supieron aprovechar en forma de éxitos grupales.