Partido decisivo en una de las series teóricamente más igualadas entre dos equipos que obtuvieron el mismo récord tras los 82 partidos de temporada regular. Los Heat llegaban a Charlotte con vistas a dejar la serie casi sentenciada, mientras que los hombres de Steve Clifford afrontaban la necesidad de ganar ante su público para no poner demasiadas losas es su andadura. 

Igualdad controlada

El primer contratiempo para los locales se presentaba en forma de baja de uno de sus mejores jugadores como es Nicolas Batum cuya lesión sufrida en el anterior partido tenía mala pinta y tendrá complicado volver. El alero de los Heat Luol Deng fue de los más destacado de los primeros minutos anotando 12 de los primeros 18 puntos de Miami. Kemba Walker y Al Jefferson, por su parte, trataban de  tirar de su equipo. Sin embargo, un parcial de 5-0 de Miami con triple de Deng y canasta de Wade hacía pasar del 13-13 al 13-18. Seguidamente, un triple de Jeremy Lin ponía el 18-21 y una posterior canasta de Kaminsky dejaba a Charlotte a un punto y obligaba al tiempo muerto de Erik Spoelstra. El bloqueo y continuación de Lin y Walker con Jefferson fue una de las grandes armas locales. Destacó que los Hornets tuvieron cero pérdidas en el primer cuarto por las tres de los visitantes. Empezó muy bien Lin poniendo en apuros a la defensa de los Heat. Dos tiros libres Courtney Lee culminaban la remontada local poniendo el 29-28.

Al comienzo del segundo cuarto se mantiene la igualdad con la que terminó el primero. Jeremy Lin llegaba a los 12 puntos poniendo el 32-37 con canastones y haciéndose imparable en sus acciones ofensivas. Los rebotes ofensivos le dieron la vida a Miami anotando en segundas oportunidades. Un canastón de Kemba Walker frente a la defensa de Justis Winslow plasmaba la superioridad parcial de los Hornets poniendo además una ventaja de cuatro puntos para su equipo. Spoelstra no se lo pensó más de la cuenta, y ante cualquier atisbo de distanciamiento decidía parar pidiendo tiempo muerto. Al Jefferson impuso su dominio en la pintura consiguiendo diez puntos en diez minutos. Cuando el segundo cuarto ya se iba consumiendo se sucedieron jugadas de fallos en ambos bandos. Miami acumulaba un pobre 5/18 en tiros de campo en el segundo cuarto, por el 47% de su rival. Un triple de Marvin Williams ponía tierra de por medio con el 49-44, además de suponer un gran apoyo anímico para su equipo. Además, una gran defensa Charlotte muestra de la labor de Steve Clifford obligaba a que Justise Winslow fallara un tiro muy forzado. Tras un nuevo fallo de los Heat se llegó al descanso con ventaja local tanto en el marcador como en sensaciones.

Distanciamiento local

Los terceros doce minutos comenzaron con fallos, y un bajo 2-0 en los primeros dos minutos hasta un triple de Deng en transición llevando al jugador a acumular 15 puntos con 5/5 en triples. El pobre 0/6 con el que empezaron los locales el tercer cuarto hizo que el tiempo muerto de Steve Clifford no se hiciera esperar. Hassan Whiteside dio un paso al frente igualando el partido a 51 apareciendo en ataque y defensa. Un parcial de 7-0 volvía a acercar a los Heat en el marcador. Courtney Lee dio un gran respiro a su equipo poniendo el 59-53 tras un rebote ofensivo y obligando al tiempo muerto visitante. De poco sirvió esta parada, ya que se produjo un parcial 9-0 para Charlotte con un dos mas uno culminado por Frank Kaminsky. Un Kaminsky que aprovechó en gran manera los cambios producidos en los bloques cuando se quedaba defendido por gente pequeña y una canasta suya unida a un triple de Lin ponía una seria ventaja para Charlotte de 67-53. Miami estaba K.O. y su rival lo aprovechó para dejar un parical de 18-0 en seis minutos. Sin duda, el hombre que marcó la diferencia en estos terceros doce minutos fue el rookie Fran Kamisnky consiguiendo 13 puntos en este tercer cuarto.

El último y decisivo cuarto empieza fuerte con un triple de Williams y posterior canasta de Cody Zeller dejando el 80-60 en el marcador. Intensidad y cuidado del balón fueron los ingredientes del distanciamiento local sin cometer además ninguna pérdida en el tercer cuarto y prolongación al principio del cuarto. Con una distancia nunca por debajo de los quince puntos, ambos equipos bajaron el ritmo y el último cuarto perdió este toque de intensidad visto anteriormente. Los Heat eran conscientes de la situación tan adversa que tenían y no forzaron la máquina más de la cuenta. El banquillo de los locales estuvo muy por encima de la escasa aportación de los suplentes visitantes.

Al final los Hornets ganaron fácil tras unos minutos mágicos y pusieron el 2-1, consiguiendo su primera victoria en playoffs desde el 2002. En el próximo enfrentamiento, de nuevo en Charlotte, los de Steve Clifford tendrán la oportunidad de igualar la serie.