Justo antes de iniciar el año 2016, el equipo había cosechado 21 victorias y 13 derrotas. Lo que ellos no sabían es que 2016 iba a aportarles buenos resultados en temporada regular (en la presente temporada, mismas fechas, el récord es de 22-10, ligeramente superior). Chris Paul, DeAndre Jordan, Paul Pierce y compañía debían empezar el año sin contar con las insubestimables aportaciones de una de sus estrellas, Blake Griffin, quien se había lesionado en el cuádriceps durante el “derby” navideño que se jugó en el Staples. El tiempo de recuperación previsto iba a ser de un mes, y todo pintaba negro para los Clippers. No obstante y para sorpresa de todos, el equipo comenzó el año logrando una racha de 10 victorias consecutivas.

Cuando mejor le iban las cosas al equipo llegaron los Kings en forma de Cousins y su fama de tipo duro, con el objetivo del bajarles del pedestal en el que se encontraban y romper su buena racha. La siguiente noticia llamativa iba a ser la marcha de Josh Smith de nuevo a los Houston Rockets a cambio de los derechos de Maarty Leunen y Sergei Lishchuk (UCAM) y de una cifra económica que ascendía a los 460.000 dólares. El jugador, que nunca cuajó en el sistema “clipper” desde su llegada, afirmó que nunca debió irse del equipo tejano.

Agresión de Griffin

Blake Griffin y Matías Testi antes de la trifulca / Foto: Youtube.com

Pero sin duda el culebrón más sonado de la franquicia durante este año fue la pelea a golpes entre Blake Griffin y Matías Testi, utillero del equipo. El resultado lo siguiente: Una fractura en la mano derecha que tuvo al ala pívot de baja durante más de un mes, una sanción disciplinar de cuatro partidos impuesta por el cuerpo técnico al jugador, y además, una multa económica de 850.000 dólares que éste debía abonar a la franquicia por mala conducta. Ambos se encontraban cenando en un restaurante en Toronto durante la gira por el Este; de hecho, iba a ser en el partido frente a Indiana Pacers cuando el jugador se iba a reincorporar a los terrenos de juego tras su lesión de cuádriceps. Sin embargo, esta acción le tuvo apartado de las pistas durante cuatro largos meses, hasta que el 4 de abril de 2016 regresó en un partido contra los Wizards donde jugó 11 minutos, enfrentamiento en el que su equipo obtuvo la victoria por 114-109.

Ascenso a los Playoffs

De nuevo con unos Clippers al completo, sumándole la plena incorporación de “The Cyborg” a la rutina de la plantilla, el equipo concluyó la temporada regular en la cuarta posición de la conferencia. Su primer y último rival en Playoffs iba a ser Portland Trailblazers, Damian Lillard y compañía. Tras remontar la serie por parte de ambos equipos en una ocasión, las lesiones de Chris Paul y Blake Griffin fueron demoledoras para los “Clips” que se fueron a casa con un doloroso 2-4, y dejando un arsenal de dudas para los aficionados de cara a la próxima temporada.

Nueva temporada

Jugadores y técnico de los Clippers posando para la foto oficial / Foto: NBA.com

Como ya avecinábamos, la temporada 2016-2017 iba a estar marcada por la incertidumbre. ¿Seguiría unida la escuadra después de caer en primera ronda de Playoffs y tras el lío que generó la pelea de Blake Griffin? Había mucho en juego. El bloque de jugadores que durante tantos años se había mantenido fiel a su camiseta (algo poco frecuente hoy en día), la continuidad del entrenador; cuyo objetivo era ganar títulos y hasta la fecha el único anillo que porta en su dedo es de color verde y dorado. Pero afortunadamente en “Lob City” apenas nada ha cambiado. El equipo consiguió renovar al gran “J-Crossover”, Austin Rivers, Mbah Moute, Wesley Johnson y conservar a su técnico. Negoció las incorporaciones de Brandon Bass, Marreesse Speights, Raymond Felton y Alan Anderson. Sin olvidar las bajas de Jeff Green, Cole Aldrich, Jeff Ayres y Pablo Prigioni. Con este proyecto, la franquicia miraba al horizonte con ganas de demostrar por qué la afición debió tener paciencia y confianza en ellos.

2016-2017

En esta campaña el equipo ha reaccionado de forma habitual. Se encuentran en la cuarta posición de la Conferencia Oeste a tan sólo una victoria de los Houston Rockets (22-10). Su juego, sobresaliente en todos los ámbitos como viene demostrando cada temporada; la explosividad física, el tiro exterior, la garra defensiva, asistencias... Aparentemente este equipo tiene todas las armas para tumbar a cualquier rival que se le presente. Veremos si este año es el elegido para que estos chicos logren el campeonato de la NBA y su talento y esfuerzo se vean recompensados.