Un equipo continúa su andadura ascendente dejando atrás las tres derrotas consecutivas al inicio de liga y el otro sigue estancado en esa posición de descenso a la División de Honor Plata. Fue la historia que se vivió la tarde del sábado en Artaleku (Irún), en la cual el CD Bidasoa cosechó su segunda victoria consecutiva (la cual le da un respiro en la clasificación a los hombres dirigidos por Jacobo Cuétara) y el CB Ciudad de Logroño se llevó otra derrota más, y son ya 4 en 5 partidos en este arranque liguero de la Liga Loterías Asobal 2017/18.
A los dos conjuntos les esperan partidos bastante complicados en la próxima jornada de liga, sobre todo al Ciudad de Logroño, el cual se enfrentará en casa al todopoderoso FC Barcelona Lassa, lo cual por estadística pura da a entender que el conjunto logroñés cosechará una nueva derrota. Por su parte, el Bidasoa visitará al Recoletas Atlético Valladolid, una salida para nada fácil, aunque con esta dinámica tan positiva de los irundarras, sin duda será un gran partido.
Un Bidasoa dominante ante un Ciudad de Logroño irreconocible
Los primeros 30 minutos fueron bastante atípicos en Artaleku, dado que vimos una de las peores versiones en los últimos años del conjunto logroñés: pérdidas de balón tontas, falta de intensidad defensiva… gracias a esas carencias, el Bidasoa vio puntos flacos a los que atacar, y no fue para menos, dado que desde el principio arrancó a tope el conjunto dirigido por Jacobo Cuétara.
Un juego en ataque fluido y vistoso contrastaba con una imagen pobre de los hombres de “Jota” González, y eso el marcador lo notó, y mucho: al minuto 15, el conjunto logroñés ya iba perdiendo por 3 goles de diferencia (8-5), y no parecía que pudiesen darle la vuelta. El ritmo del partido lo impuso el conjunto bidasotarra hasta el final, y así lo demostró el resultado que resaltaba en el luminoso al descanso: la misma diferencia de goles que la mencionada anteriormente (14-11).
En esta primera parte, cabe hacer especial mención a la gran actuación ofensiva por parte de Rodrigo Salinas (Bidasoa) frente a los paradones bajo palos efectuados por Gurutz Aginagalde, ya que si no fuese por él, el conjunto logroñés se hubiese ido al descanso con una diferencia notablemente mayor.
Reacción franjivina obligada
Los hombres de “Jota” sabían que reaccionar a tiempo podría darles opciones al final del encuentro, pero esa reacción tardó en llegar más de lo esperado, ya que gracias a un inicio de segundo tiempo demoledor por parte del Bidasoa, el conjunto de Logroño llegó a ir 7 goles por debajo en el marcador.
Hacia el minuto 15, tras un tiempo muerto de “Jota” González, llegó esa reacción de la que se ha hablado: el Ciudad de Logroño comenzó a carburar mejor tanto en defensa como en ataque y eso se notó en el juego visto sobre el terreno de juego.
Gracias a esa reacción, la incertidumbre crecía en los aledaños de Artaleku, y viejos fantasmas se cernían sobre los hombres de Jacobo Cuétara. Aun así, y gracias a una afición de 10, el Bidasoa supo mantener la distancia de uno o dos goles hasta el final y alzarse con la victoria.
El hombre de la reacción tiene nombre y apellido: Juan Castro. El central del conjunto riojano demostró hombre que es puro corazón a la hora de ejercer el balonmano. Su actitud sobre el campo sirvió de cara a subir la moral de sus compañeros y fue una baza importante en la casi remontada. Por el otro lado, en el Bidasoa destacó el de siempre: Kauldi Odriozola.