En el día de ayer el ciclismo vivía uno de los días más interesantes del año y no había ninguna carrera de por medio, si no que se trataba de la presentación del Tour de Francia 2018. La carrera más especial por lo que atrae y por la magnitud que tiene, sin embargo las luces y sombras que dejó esta carrera se trasladaron después a la presentación de La Course by le Tour de France. El Tour de Francia volverá a estar en las agendas de las ciclistas el año que viene, o mejor dicho una prueba francesa estará en sus agendas, porque de tour tiene poco.
El año pasado se pudo observar como la formula no funciono, se intentó crear un experimento que antes de empezar ya olía mal. Las ciclistas se quejaban, los equipos no estaban agusto pero para adelante. El año pasado hubo una etapa de 67 kilómetros que terminaba en el Izoard, donde Annemiek Van Vleuten demostró ser la mejor escaladora.
Este año la etapa tendrá 118 kilómetros, comenzará en Duingt y terminará en Le Grand-Bornand. Probablemente tendrá el mismo final que el de la decima etapa del Tour de Francia, por tanto, subirán también el Col de la Romme (8,8 kilómetros al 8,9%) y el Col de la Colombiere (7,5 kilómetros al 8,5%) para finalmente bajar y acabar en Le Grand-Bornand.
Un paso adelante y dos pasos para atrás
Hace unos años la prueba se disputaba en los campos elíseos con un apoyo masivo donde la ganadora era reconocida por todos, pues en los medios de comunicación se le daba mayor importancia a la que se le da con estos experimentos. El año pasado se intento ayudar a un deporte que lo necesita como el comer, pero resulto ser una ayuda ficticia. Todavía nadie sabe si lo del año pasado eran dos etapas, una o un circo que pasaba por allí.
La primera etapa la disputaban todas las ciclistas y daba puntos UCI, sin embargo la “segunda” no dio nada, ni puntos, ni espectáculo ni espectadores y para colmo la disputaban solo las 20 primeras en llegar al Izoard. La gente se preguntaba si esto era ciclismo, por tanto las ciclistas y la gente que disfruta del ciclismo femenino ven esto como un paso atrás que no ayuda para nada al ciclismo femenino, sino que se dan pasos hacia atrás pues el circuito de los campos elíseos al menos atraía a la gente.
La prueba de este año tendrá solo una etapa cuando se esperaban más de dos, además de nuevo será para las escaladoras, rompiendo cualquier posibilidad de espectáculo, pues quien sea la mejor escaladora será quien se la vuelva a llevar, hay que decir que han aumentado el número de kilómetros y ahora ya no se trata de un critérium.