El sábado dos de julio, una nueva edición del Tour de Francia echará a rodar. Quizás la edición con mayor elenco de estrellas de la que se puede tener recuerdo. A los principales favoritos a la victoria, Contador, Froome, Quintana y Aru, se le unen una temible segunda línea que bien puede hacer tambalearse los cimientos de la primera. Algunos de los que la conforman son los siguientes:

Alejandro Valverde (Movistar Team)

El ciclista murciano llega a la ronda gala con la tranquilidad del podio conseguido el año pasado y con la moral del logrado en su primera participación en el Giro de Italia hace dos meses. La Bala será sin duda un gregario de lujo para su líder, Nairo Quintana, el cual busca alzarse, por fin, con el ansiado maillot amarillo tras dos intentos fallidos.

Varios años ya en el ciclismo profesional muestran la fuerza, capacidad de entrega y recuperación de un ciclista que puede presumir de haber hecho podio en las tres grandes, y proclamarse vencedor en una de ellas, la querida Vuelta a España. Así, el escalador asegurará espectáculo, una vez que parece que este año estará liberado de la vigilancia de sus rivales, más centrados en controlar a los verdaderos candidatos, a priori, al triunfo final.

Vincenzo Nibali (Astaná)

El Tiburón de Messina, como es conocido en el pelotón internacional, tendrá un papel similar al recientemente comentado del murciano Alejandro Valverde. Triunfador en el pasado Giro de Italia tras una espectacular remontada, favorecida por la caída del holandés Kruisjwik, el italiano no dudará en echar el resto para ayudar a su compatriota y compañero de equipo, Fabio Aru, que busca su primer Tour de Francia con tan sólo veinticinco años.

Nibali ya sabe lo que es pasearse de amarillo por los Campos Elíseos y no cabe duda de que en años venideros lo volverá a intentar. Sin embargo, este año, con la participación en la carrera italiana, las fuerzas no le permitirán luchar por la victoria final. O si, ya veremos, porque este escalador está hecho de una pasta diferente al resto de ciclistas del pelotón.

Nibali y Valverde en el podio del Giro de Italia | Fuente: Giro de Italia
Nibali y Valverde en el podio del Giro de Italia | Fuente: Giro de Italia

Joaquim Purito Rodríguez  (Katusha)

El eterno aspirante al triunfo final en una grande se presenta a este Tour con ganas de dar guerra, como siempre hace, y con un equipo de confianza y reforzado con la sorpresa del pasado Giro, Ilnur Zakarin. El ruso tuvo que retirarse por una aparatosa caída pero no ha dudado en poner sus servicios al que, a priori, es el líder del equipo.

Sabemos de la ambición del catalán y las grandes etapas de montaña que esta edición presentan pueden ser el momento perfecto para que Purito vuelva a pasear su nombre por las cumbres francesas. Algo queda claro entre los expertos, si hay posibilidad, por mínima que sea, de alcanzar el podio o incluso la victoria, tanto él como su equipo harán todo lo que está en su mano para alcanzarlo. Sin duda, hará amenas las tardes de Julio.

Richie Porte (BMC)

Cuando el pasado Tour llegaba a sus etapas finales, en el pelotón saltó la noticia. Chris Froome se quedaba sin uno de sus mejores gregarios, Richie Porte, que decidía emprender su camino en solitario en el BMC americano. Unos años a la sombra del inglés en el Sky no le impidieron mostrar su gran nivel y llamar la atención de los grandes equipos.

Por ello, se presenta al Tour de Francia no como gregario, si no como aspirante al triunfo final con un gran equipo que estará al servicio tanto de él como del otro líder y aspirante a la victoria en la ronda gala, Tejay Van Garderen. Moinard, Van Avermaet, Dennis y Caruso serán unos escuderos perfectos para aprovechar cualquier bajón de los favoritos.  Habrá que estar atento si cumple las expectativas y no pasa como en las grandes en las que su anterior equipo, Sky, le mandaba como jefe.

Tejay Van Garderen (BMC)

Ya consiguió poner contra las cuerdas a los favoritos el año pasado, y este año se muestra más que convencido de ser la quinta estrella, la primera de esta temible segunda fila que estamos describiendo. Aparentemente, compartirá liderazgo de equipo con el australiano Porte y será el devenir de la carrera quién responda a la pregunta de quién es el verdadero jefe de este equipo.

Tejay siempre ha rendido en la ronda gala, en la que se siente muy a gusto y se adapta a la perfección. El año pasado, un abandono en la tercera semana le quitó toda opción a podio que, por aquel entonces, era más que posible ya que se encontraba en tercera posición. Este año, teniendo en cuenta la participación, un podio sería un éxito para el equipo americano pero Van Garderen no renuncia a nada.

Momento del abandono del americano | Fuente: eitb
Momento del abandono del americano | Fuente: eitb

Romain Bardet (Ag2r La Mondiale), Thibaut Pinot (FdJ) y Warren Barguil (Giant)

Son las tres grandes esperanzas francesas. Este trío, en el que nadie llega a los veintisiete años, ya estuvo peleando por el podio en el Tour 2014, ese que Nibali se impuso con una tremenda claridad.

Ahora, los aficionados galos están esperando el salto cualitativo que parece que pueden dar. Los tres son líderes de sus equipos y aspirantes al podio final, pero también son tres escaladores que, a la hora de la verdad, la presión les puede acabar pasando factura.

Siempre aspirantes al maillot blanco de mejor joven, que ya han ganado en alguna ocasión, quizás este año sea el de algo más. Pinot ya sabe lo que es subir al podio en los Campos Eliseos (tercero en 2014), mientras que Barguil y Bardet son habituales cazadores de etapas de montaña.

Bardet y Pinot, las esperanzas galas | Fuente: Velominati
Bardet y Pinot, las esperanzas galas | Fuente: Velominati

De una manera o de otra, siempre que participan, se dejan ver.  Junto con el resto de integrantes de esta segunda fila, asegurarán un espectáculo que nos puede hacer disfrutar y mucho a los amantes del ciclismo.