Después de imponerse BMC en la contrarreloj inicial, hacer lo propio Yves Lampaert en la segunda etapa, llevarse el italiano Vincenzo Nibali la tercera etapa, primera gran jornada de montaña, y por último rematar el italiano Matteo Trentin la primera llegada masiva en la cuarta etapa de la ronda española, la quinta etapa hacía acto de presencia en la Vuelta a España con 175,5 kilómetros entre Benicàssim y la Ermita de Santa Lucía en Alcossebre. Jornada complicada para los hombres de la general, ya no solo por el último muro que tendrían que afrontar, sino que durante todo el día se encontrarían con un continuo sube y baja comenzando por el Alto del Desierto de las Palmas (2ª categoría), continuando con el Alto de Cabranes (3ª categoría), el Coll de la Bandereta (2ª categoría) y el Alto de la Serratella (2ª categoría). Sin duda alguna, jornada perfecta para que la fuga hiciera camino por delante, pudiendo relajarse los hombres de la general hasta jugarse el todo por el todo en la llegada final, buscando abrir el mayor hueco posible entre ellos.

La fuga abre camino

Como no podía ser de otra manera, en el pelotón la tensión se palpaba en el ambiente antes de tomar la salida, no era una jornada fácil, con puertos encadenados y muchos corredores queriendo coger la escapada. Y así fue, tal y como se esperaba los ataques se sucedieron desde el banderazo de salida, quedando un grupo de nueve ciclistas por delante y otro de siete por detrás persiguiéndose, hasta que tras unos kilómetros de lucha conseguían unirse formando la escapada del día ni más ni menos que diecisiete ciclistas, los siguientes: Julian Alaphilippe (Quick Step), Rubén Fernandez y Marc Soler (Movistar Team), Michael Schwarzmann (Bora-Hansgrohe), Alexis Gougeard (Ag2r La Mondiale), Davide Villella (Cannondale-Drapac), Marco Haller y Matvey Mamykin (Katusha-Alpecin), Matej Mohoric (UAE Team Emirates), Alexey Lutsenko (Astana Pro Team), Valerio Agnoli (Bahrain-Merida), Jérémy Maison (FDJ), Merhawi Kudus (Dimension Data), Lluis Mas y Héctor Saez (Caja Rural-Seguros RGA), Michel Kreder (Aqua Blue Sport) y Jetse Bol (Manzana-Postobón).

El hecho de que fueran muchos corredores siempre pone en alerta al pelotón, pero ni mucho menos estaba por la labor el Team Sky de iniciar una guerra contra ellos, controlándos en un primer momento en torno a los tres minutos de ventaja para que después de superar el Alto del Desierto de las Palmas (2ª), Alto de Cabanes (3ª), Coll de la Bandereta (2ª) y Alto de la Serratella (2ª) la diferencia con la que contaba la escapada se disparaba hasta ni más ni menos que los siete minutos, siendo virtualmente líder Jetse Bol. A poco menos de cincuenta kilómetros para el final comenzarían las hostilidades entre los fugados, siendo Marco Haller el encargado de probar suerte en solitario, abriendo hueco en un terreno escarpado de sube y baja camino del sprint intermedio para que finalmente consiguieran darle caza Alexey Lutsenko y Mate Mohoric, no pudiendo este último seguir el ritmo de sus dos acompañantes durante una pequeña subida.

La escapada del día | Foto: PhotoGomezSport - LaVuelta
La escapada del día | Foto: PhotoGomezSport - LaVuelta

Comienzan las hostilidades en la escapada

Más allá de que mucho de los escapados cedían terreno, tanto Lluis Mas como Marc Soler probaban suerte sin posibilidad de irse hacia delante, siendo neutralizados para que al instante aprovechara para saltar de la escapada Julien Alaphillippe. A veinte kilómetros de la conclusión y con treinta segundos de desventaja sobre el dúo cabecero, se formaba un cuarto en el que estaban Gougeard, Kudus, Alaphillippe y Marc Soler. Con el pelotón poco a poco incrementando la velocidad al acercarse el muro de la Ermita de Santa Lucía, la pelea por entrar bien colocado en el grupo principal era cuanto menos entretenida. A tres kilómetros del final de la etapa los primeros en llegar al muro final eran los escapados, siendo Lutsenko y Haller los encargados de tener treinta segundos de adelanto sobre el cuarteto perseguidor. El más fuerte del dúo sin duda alguna era Lutsenko, que se marchaba en solitario sin que Haller pudiera plantarle cara.

Kudus se convertiría en el perseguidor más fuerte de Lutsenko, no consiguiendo frenar al corredor kazajo, que terminaba llegando en solitario a la línea de meta, celebrano la victoria por delante de Kudus y de un Marc Soler que se le escapó el triunfo al no entrar en el corte bueno. Por detrás, con la victoria de etapa ya decidida, el pelotón entraba en la cota final de la mano de Gianni Moscon (Team Sky), que poco a poco iba rompiendo el grupo hasta que se quedaban poco más de veinte ciclistas, momento en el que comenzarían a aparecer los ataques.

Chaves, Froome y Contador, los tres grandes favoritos que llegaron juntos a meta junto a Woods | Foto: PhotoGomezSport - LaVuelta
Chaves, Froome y Contador, los tres grandes favoritos que llegaron juntos a meta junto a Woods | Foto: PhotoGomezSport - LaVuelta

El ataque de Froome llegaría siendo tan solo Chaves, Contador, Van Garderen y Woods los corredores capaces de seguirle, probando incluso Contador y Chaves atacar sin suerte, para que al final Alberto Contador entrara en primera posición entre los favoritos, Froome segundo, Chaves tercero y Woods cuarto, mientras que Van Garderen cedió ocho segundos y once se dejaron hombres como Adam Yates, Zakarin, Aru, Kelderman y Roche.

Clasificación de la etapa