El Arsenal se enfrentaba a un Sunderland que venía de recibir la mayor goleada de su historia, un 8-0 en su visita al Southampton. El Arsenal se iba a encontrar ante un rival con un planteamiento muy conservador, con la intención de no dejar espacios y acumular gente por detrás del balón. Ante esta obviedad, Wenger optó por un once menos ofensivo de lo habitual, también muy condicionado por las bajas.
El ataque estático no funcionó
Arsène Wenger contaba con la sensible baja por sanción de Jack Wilshere, que venía siendo indiscutible en el esquema del alsaciano. Wenger optó por juntar un doble pivote más recuperador, de más trabajo y no tan llegador, formado por los veteranos Arteta y Flamini. Y el equipo pecó de falta de salida de balón. Si bien es cierto que el Sunderland no apretó arriba, cuando los blackcats plantaban dos líneas de cuatro en su propio campo, al Arsenal le faltaban ideas.
Esta vez, Alexis jugó más centrado desplazando al teórico mediapunta, Santi Cazorla, a la banda izquierda. El chileno fue el más incisivo y el que más lo intentó, pero ni Cazorla ni Chamberlain por las bandas,ni tampoco Welbeck, perdido en una maera de camisetas blancas y rojas, ayudaron a Alexis.
Santi Cazorla se sentía arrinconado en la banda izquierda y se veía obligado a ir a recibir al centro para participar en el juego. Su banda no fue bien ocupada por Gibbs, que estaba pendiente de que Adam Johson no le ganara la espalda al contraataque. Por la banda derecha, Chamberlain quiso hacer la guerra por su cuenta, y casi todas sus jugadas acababan en centros sin receptor alguno. Y en el centro, Welbeck estuvo desactivado, rodeado en todo momento de defensores y torpe en las devoluciones a sus compañeros.
Suerte tuvieron los gunners de encontrarse con un Sunderland con la moral por los suelos y una seguridad que brillaba por su ausencia. Alexis parece que fue el único que percibió esta inseguridad en los hombres de Poyet, y, siguiendo su instinto, fue a morder y provocó dos errores de Brown y Mannone que significaron la victoria para el Arsenal.
Una defensa poco exigida pero igual de insegura
El panorama en fase ofensiva del Arsenal no era muy alentador y, mientras tanto, Arteta y Flamini se encontraban ociosos en la sala de máquinas, esperando los contragolpes de un Sunderland que nunca sacó las uñas.
En defensa, Calum Chambers volvió tras la suspensión al lateral derecho, ocupado con solvencia el fin de semana pasado por Héctor Bellerín. Monreal siguió ocupando un puesto en el centro de la zaga con Mertesacker y Gibbs actuó de lateral izquierdo. Monreal no se muestra muy seguro de central, y teniendo en cuenta el buen nivel mostrado por Bellerín de lateral, Wenger debería considerar la posibilidad de jugar con una defensa formada por Bellerín-Chambers-Mertesacker-Gibbs/Monreal.
"La victoria es vital para la moral"
Arsène Wenger destacó el aspecto moral de la victoria de su equipo y está seguro de que hará aumentar la confianza de la plantilla. Además, el técnico también se mostró muy satisfecho por conseguir dejar por primera vez la portería a cero esta temporada: "Al final conseguimos una muy buena victoria, y además mantuvimos la portería a cero. Estoy muy contento."
El entrenador alsaciano se acordó del empate concedido hace una semana ante el Hull, y se mostró satisfecho con la reacción de su equipo: "Nos dejamos dos puntos contra el Hull, pero hoy lo hemos compensado con esta victoria. También es muy importante para nosotros el hecho de escalar alguna posición en la tabla."
Finalmente, Arsène Wenger valoró el papel del protagonista del partido, Alexis Sánchez: "Alexis siempre continúa hacia delante. No tiene miedo de ir hacia delante, va a por ti. A veces, sus pases no son lo suficientemente rápidos,pero él es muy eficaz y juega para ganar. Es un ganador. "